Lo confirmó el gremio minero y advirtió que el cierre de Loma Negra provocará "una verdadera explosión social en Barker y Villa Cacique, ya que en la zona no existe ninguna otra alternativa laboral".
El titular de la Asociación Obrera Minera Argentina (AOMA), Héctor Laplace, estimó que la empresa cementera Loma Negra cerrará de forma definitiva su planta de la localidad bonaerense de Barker, luego del frustrado encuentro conciliatorio del martes último en la Secretaría de Trabajo de la Nación, lo que provocará 330 despidos.
El dirigente explicó que "la fábrica está paralizada desde hace unos 40 días, aunque los operarios perciben de forma normal sus salarios", y adelantó que cien trabajadores comenzarán a recibir los telegramas de despido casi de inmediato, si bien "la firma se comprometió a abonar el ciento por ciento o más de las indemnizaciones de ley".
Laplace indicó que el establecimiento fabril está ubicado a unos 100 kilómetros de Tandil y a 80 de Benito Juárez, la cabeza de partido, y que el 80 por ciento de la actividad de Barker se concentra desde hace seis décadas alrededor de Loma Negra, por lo que evaluó que "el cierre provocará una verdadera eclosión social".
"La empresa nunca estuvo en crisis y, sus balances, no pueden demostrarlo, por lo que es inviable algún reclamo de Procedimiento Preventivo de Crisis (PPP)", afirmó el dirigente sindical, quien denunció que "la decisión fue adoptada por estrictas razones de política comercial a partir de la determinación de abrir otra planta en Olavarría".
El conflicto comenzó en marzo último y, luego de un paro decidido por la seccional local de la AOMA, la Secretaría de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por un período hábil de 15 días, que luego prorrogó por otros cinco y expiró el martes, explicó Laplace.
"En Producción y Trabajo de la Nación, Loma Negra propuso como única salida reducir de tres a uno los turnos de trabajo, entre las 8 y 16 de lunes a viernes y de 4 a 12 los sábados, pero ello implica que queden 24 empleados en total. Es inaceptable", afirmó.
Loma Negra, del grupo brasileño Camargo Correa, emplea en Barker a 330 trabajadores, de los cuales más de 200 son afiliados a la AOMA y, el resto, pertenece a firmas contratistas o tercerizadas o es personal jerárquico o de supervisión o cumple tareas en las secciones de limpieza y de cantera, aseguró el dirigente a la agencia Télam.
"Si se cae el trabajo de cantera, que está tercerizado, se cae todo. Pero ya la empresa advirtió que no pondrá más en marcha los hornos de cemento. Significa el cierre", dijo.
Según el dirigente, Trabajo "se limitó a exhortar a las partes a continuar el diálogo, pero la solución está muy lejana porque con mucho esfuerzo podrían seguir trabajando 50 de un total de 330 empleados", lo que producirá "una verdadera explosión social en Barker y Villa Cacique, ya que en la zona no existe ninguna otra alternativa laboral".
"Proponer un solo turno de trabajo como única salida es proponer el cierre definitivo del establecimiento fabril, porque los patrones saben que es inaceptable", puntualizó.
El conflicto ya provocó la movilización de las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) y de las fuerzas vivas, que quieren evitar que la región se convierta en "fantasma", señaló Laplace, quien denunció que Loma Negra decidió "esa política comercial porque en algunos años inaugurará con el más alto nivel tecnológico y de punta una nueva fábrica en la localidad de Olavarría y prácticamente sin obreros, que no serán necesarios".
"Ese es el proyecto, lo que no deja margen de negociación, ya que en Olavarría la producción y despacho será infinitamente superior. El problema es que la compañía no se hace cargo de su responsabilidad social y aduce que la eclosión que genere su decisión no es un problema que la atañe. Se trata de otro caso de capitales financieros internacionales que llegan al país solo para hacer negocios", concluyó el sindicalista.
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