La dirigencia rechazó la idea de la gestión libertaria de implementar estos instrumentos para presionar y lograr acuerdos salariales dentro del techo del 1-2 por ciento. Se espera en enero tensiones por las paritarias ya firmadas.
Con el objetivo de mantener las paritarias bajo los parámetros proyectados por el Ministerio de Economía, el gobierno nacional tuvo en diciembre mucha intervención en discusiones claves, como la de los camioneros y los metalúrgicos. En el primer caso festejó un acuerdo trimestral cercano a las cifras proyectadas, mientras en el caso de la UOM terminó sin acuerdo en las dos ramas principales, y con el enojo del gremio, que denunció la “falta de libertad para discutir salarios”.
Lejos de retroceder, para este 2025 se esperan más intervenciones de la mano de la secretaría de Trabajo, encargadas de mantener las reuniones bajo esos parámetros. Para potenciar el techo, el oficialismo ya piensa en dos instrumentos, que buscarán aumentar el control estatal sobre las paritarias: los acuerdos por empresa y la productividad en los acuerdos.
Estas dos cuestiones aparecen cada vez que los gobiernos quieren intervenir en las negociaciones, y son rechazadas por los gremios, que afirman que lo que pretenden son “congelas” las discusiones. Mientras estas cuestiones se ponen en marcha, muchas organizaciones esperan que lo firmado en 2024 se cumple, en un enero que estará marcado por esta problemática.
Según las versiones que circularon en varios medios, el gobierno de Javier Milei quiere intervenir más en las paritarias, lejos de aquella opinión de campaña, donde se hablaba de “una discusión entre privados donde el Estado nada tiene que hacer”. Ahora, se buscará intervenir con estos dos elementos.
En el primero caso, las autoridades señalan que los sindicalistas (muchos de los cuales vivieron la experiencia del fortalecimiento del peso en la época de la Convertibilidad en los años noventa) “tienden a mostrarse más permeables que antaño”, aunque admiten que los acuerdos por sector “encierran el peligro de dejar descolocadas a las unidades más débiles, abriendo la posibilidad de despidos y eventualmente el cierre de empresas”. Además, en el gobierno consideran “imprescindible” que en paritarias se discutan no sólo las remuneraciones, sino las condiciones laborales en general, buscando aumentos en la productividad.
Desde la secretaría de Trabajo argumentan que “están dispuestos a acompañar a empresarios y gremialistas en este proceso”, según confiaron fuentes oficiales a este medio.
📌 NUEVAS ESCALAS SALARIALES
La Federación Nacional de Trabajadores Camioneros acordó el aumento trimestral para las y los trabajadores, las nuevas escalas correspondientes a diciembre 2024 y enero / febrero 2025 más una gratificación extraordinaria de 600 mil pesos. pic.twitter.com/nJeOJ1fNhd
— infocamioneros (@cgt_camioneros) January 6, 2025
Pero los gremios ven estas cuestiones como trabas para la discusión salarial. “Al condicionar las paritarias por rama busca congelar ese ámbito y que en la práctica se hagan acuerdos por empresa, donde se pueda según el nivel de actividad”, explicó Héctor Amichetti, titular de la Federación Gráfica Bonaerense.
En diálogo con Data Gremial, el dirigente, referente de la Corriente Federal de los Trabajadores, explicó que el gobierno “busca un marco salarial parecido al de los ‘90 con paritarias congeladas por la convertibilidad y acuerdos por empresa en base a productividad, el inconveniente que enfrenta es que la inflación permanece cercana al 3 por ciento mensual y eso va a generar situaciones de conflicto con la mayoría de los gremios”.
Durante diciembre, la cartera laboral intentó mediante la no homologación de acuerdos frenar cualquier pauta por fuera de la pauta oficial. Por eso festejaron lo logrado entre el Sindicato de Camioneros y las empresas, y lo piensan como “un modelo” para las discusiones de este año.
Posturas
Los argumentos del gobierno para seguir interviniendo se basas en datos sobre la recuperación económica y su impacto en los ingresos. Desde la secretaría de Trabajo revelaron en estos días través de distintos índices la “evolución positiva” del empleo en la Argentina, en especial el Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) y la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL), que muestran los números de octubre y noviembre, respectivamente.
De acuerdo con los datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), el empleo asalariado registrado en el sector privado creció un 0,1 por ciento en octubre y acumuló una suba de 0,3 por ciento desde agosto, equivalente a la incorporación de 17 mil trabajadores. En tanto, la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) -que mide el empleo asalariado registrado privado en empresas con más de diez trabajadores-, registró un incremento del 0,2 por ciento en noviembre con relación al mes anterior, lo cual implica un aumento de 0,7 por ciento con respecto a agosto.
Pese a esto, los gremios alertan sobre la pérdida salarial. En su informe mensual sobre ingresos, la Junta Interna de ATE en el INDEC estableció que “Un trabajador necesitó, en noviembre de 2024, 1.576.285 pesos para satisfacer las necesidades mínimas de un hogar constituido por una pareja mayor de 30 años con dos hijos en edad escolar”. Este valor se compone de “539.289 pesos necesarios para adquirir una Canasta Alimentaria Mínima y de 1.036.996 pesos para acceder a otros bienes y servicios básicos”. “La actualización del presente informe, al mes de noviembre de 2024, vuelve a confirmar que para este gobierno somos una de las variables del terrible ajuste que le impone a la sociedad”, se quejaron.
“Ajustar, y con eso logran que la variación de precios sea menor mes a mes. Lo planteo el gobierno cuando asumió que iban hacer el mayor ajuste de la historia, inclusive, más allá de lo que iba a plantear el propio FMI”, reflexionó la Junta Interna. Para el trabajo, al que tuvo acceso Data Gremial, “podrá bajar la inflación y tal vez la pobreza pero este gobierno lo hace, o hará, a costa del sufrimiento de los que menos tienen. Y volvemos a reiterar que la menor variación del IPC también se debe a la caída estrepitosa del consumo, especialmente por la pérdida de poder de compra de los trabajadores y los jubilados”.
Pautas ya cerradas
En tanto, hay dudas respecto de lo que puede pasar con los acuerdos ya firmados, ya que tiene aumentos para enero por fuera de la pauta oficial. Si bien no hay antecedentes que se desconozcan convenios ya vigentes, pueden darse demoras en su implementación, como pasa con los choferes de colectivos, que muchas empresas no están pagando los aumentos bajo el argumento de la falta de recursos.
Por eso hay expectativa con lo que puede pasar con las subas acordadas para enero de este año. La Unión Obrera de la Construcción (UOCRA), por ejemplo, cerró diciembre con un aumento salarial del 4 por ciento, acompañado de un bono no remunerativo de 25 mil, que se abonará hasta enero de 2025.
NUEVA GRILLA SALARIAL
La FAAPRoMe y AAPM de la RA firmaron un nuevo acuerdo de actualización salarial para que nuestro salario básico no pierda frente a la inflación.
Se continuarán las discusiones en el mes de Abril.#visitadoresmedicos #salarios #paritarias pic.twitter.com/zcsSoBljZW
— AAPM (@AAPMRA) December 20, 2024
Quienes están bajo la pauta forzosamente son los empleados públicos, que obtendrán un incremento salarial del 1 por ciento, junto con una suma fija no remunerativa de 30 mil pesos. Además, percibirán un premio estímulo único de 30.906 pesos en los salarios de diciembre.
El Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (SUTNA) acordó un aumento del 2 por ciento en diciembre, con una cláusula que garantiza un ajuste automático si la inflación supera dicho porcentaje. Este acuerdo involucra a las principales empresas del sector, como FATE, Pirelli y Bridgestone. Los visitadores médicos recibirán un aumento significativo, saliendo de esa pauta. Desde diciembre de 2024, su salario básico será de 1.179.082 pesos, mientras que la garantía mínima ascenderá a 1.641.000 pesos. Además, se fijó una reapertura de negociaciones en abril de 2025.
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