La Asociación Docentes de Santa Cruz resolvió un nuevo paro provincial por 96 horas, que se cumple desde este martes 27 al viernes 30, con la reafirmación de sus demandas gremiales.

La ADOSAC reiteró su exigencia de una recomposición salarial que acompañe a la cláusula gatillo “para sacar a todos los docentes de la línea de pobreza”, además de repudiar por “antidemocrático y carente de soluciones que plantea la docencia santacruceña” al decreto provincial 695/23 que otorgó un aumento del 3% a partir de julio.

El gremio sostuvo además su reclamo por la de derogación de la Resolución 066/18, al considerar que constituye una condición “indispensable” para comenzar el proceso de titularización.

En su listado de reclamos, que acompañan a estas tres jornadas de paro, la entidad sindical incluyó el pago de título en el segundo cargo “basado en el principio constitucional de por igual tarea-igual remuneración”.

El sindicato también rechazó la implementación de la Jornada Extendida y Completa en la provincia, por considerarla “improvisada” y “flexibilización laboral”.

En ese sentido, el gremio pidió que se incorpore a la liquidación por jornada extendida o jornada completa, según corresponda, a los docentes que se encuentran de licencia médica o en relevo de funciones.

Por otra parte, ADOSAC pidió al Consejo Provincial de Educación y Desarrollo Social que se garanticen las meriendas y viandas para los alumnos y docentes de las instituciones provinciales “de acuerdo a la jornada que desarrolla” y exigió “un inmediato plan de inversión de mantenimiento e infraestructura en educación”.

Más adelante, la organización sindical denunció que se lleva adelante un programa de recuperación de clases que está a cargo de “personajes ajenos a las instituciones educativas que en muchos casos no cuentan con título docente”.

En tanto, en lo que respecta a las comisiones de ofrecimientos, el gremio solicitó el retorno a la presencialidad según el circuito que la marca la normativa y que se garantice “la transparencia de los mismos”.

Otras de las demandas es la conformación de juntas médicas que se vienen postergando, lo que pondría en riesgo “el resguardo laboral y salarial” de los docentes que se encuentran de licencias por enfermedades crónicas.

La dirigencia también reclamó la conformación de una comisión “en conjunto con el CPE para armar una nueva orgánica de cargos por zonas y descentralizar la capital”, en la que estén incluidos los cargos de supervisores en las áreas de Música y Educación Física, como así también empleados administrativos de todos los niveles.

Finalmente, la ADOSAC denunció “el vaciamiento de la Modalidad Especial, que sigue siendo blanco de ajuste con la falta de creación de cargos para responder la constante demanda que existe en todos los niveles para acompañar las trayectorias educativas de los alumnos con CUD, de forma integral”.

Al respecto, el gremio acotó que ese hecho constituye “una especie de privatización de esta función docente”, teniendo en cuenta el crecimiento de la demanda de esa modalidad por parte de las obras sociales particulares.