El gremio que representa a los trabajadores de la AFIP en Bahía Blanca señaló que es importante fijar un marco normativo.
Por Pablo Andrés Alvarez.
Analizar las ventajas y desventajas del trabajo remoto, también denominado teletrabajo, es una de las tareas prioritarias que está desarrollando desde antes de la pandemia la Asociación de Empleados Fiscales e Ingresos Públicos, que actualmente tiene a la totalidad de sus afiliados cumpliendo funciones en forma remota.
“Regular el teletrabajo era un tema que como gremio ya veníamos conversando, porque la tecnología tiene cada vez un peso mayor en las labores diarias y preveíamos que se avecinaban cambios en las modalidades, pero el coronavirus precipitó la cuestión y encontró al organismo poco preparado en ese sentido”, señaló Sebastián Mas, secretario general de AEFIP Bahía Blanca.
Incluso, para el 19 de marzo, el gremio tenía organizada una jornada que debió postergar sobre este tema.
“Habíamos consensuado una mesa multisectorial, con participaciones de entidades gremiales y empresarias, políticos locales y representantes de las cuatro universidades que funcionan en la ciudad para empezar a analizar los cambios en los trabajos por el avance de la tecnología”, esgrimió Mas.
A partir de la cuarentena, los trabajadores del organismo debieron cumplir esta nueva modalidad remota.
“Hoy el 100 por ciento del organismo está desarrollando sus labores desde sus hogares, cumpliendo alrededor del 95 por ciento de los trámites. Ese 5 por ciento queda reservado a trámites sí o sí presenciales, en los que se debe contrastar información de trámites originales, que sólo están en soporte papel. Desde ese punto de vista, creo que el funcionamiento del organismo no decayó y que la adaptación y rendimiento de los trabajadores ha sido muy bueno”, añadió.
--¿Pensás que muchas de estas cosas llegaron para quedarse?
--Es difícil responderlo con cierto grado de certeza, porque mucho depende de las decisiones de los directivos nacionales. Pero sí es verdad que no vamos a tener una realidad similar a la que teníamos antes de la pandemia. Es inimaginable a corto plazo volver a esa habitualidad.
“Quizás la gente se acostumbre a realizar muchos trámites on-line y deje de acudir a las oficinas, pero nuestro trabajo dentro del organismo deberá hacerse. Quizás el cambio mayor se vea reflejado en una disminución importante de personas, pero la recepción de los trámites se hará on line de todas maneras”.
Y añadió: “Seguramente, las patronales nos presentarán esta modalidad de trabajo con muchos beneficios, pero los gremios debemos analizar más fríamente la cuestión, para que las fuentes de trabajo no corran riesgo y para que haya normativas claras. Hoy, por ejemplo, al trabajar cada uno desde su hogar es difícil delimitar cuál es el horario laboral, que se ee extienden y se mezcla con los tiempos personales y de familia”.
“Creo que se debe encontrar un equilibrio en la conveniencia de trabajar en forma remota entre las empresas y los trabajadores”.
Dentro de la jurisdicción de Bahía Blanca, algunos distritos ya abrieron las oficinas de AFIP.
“Llevan a cabo protocolos a nivel nacional con particularidades adaptadas a cada localidad, pero son muy estrictos. En Bahía Blanca decidieron esperar un poco más”.
Comentá la nota