La Asociación Argentina de Capitanes, Pilotos y Patrones de Pesca (AACPPyP) informaron hoy en un comunicado que el sector está en alerta y que comenzó a “analizar con los afiliados parar las zarpadas a zona de pesca”, ante “el silencio empresarial” al reclamo de medidas sanitarias.

La organización gremial, conducida por Jorge Frías, envió el martes, por nota, a los presidentes de la Cámara de la Industria Pesquera Argentina (CAIPA), Fernando Rivera, y de la Cámara de Armadores de Buques Pesqueros de Altura (CAABPA), Diego Luchetti, una propuesta “para realizar hisopado a los capitanes que así lo acepten y consensuar el horario de zarpada tres horas después de que el buque sea totalmente pertrechado”.

El tiempo de espera de tres horas, durante el cual “nadie podrá subir a la nave”, fue propuesto como una de las medidas para prevenir el contagio, junto a la desinfección total de los buques, lo que le dejará a la tripulación como única tarea “ajustar trojas de cajones y asegurar cabos”, según consta en la nota enviada.

“Durante la marea, el capitán exigirá uso de barbijos, prohibirá las tertulias en el descanso; las cuchetas deberán contar con cortinas, realizándose acto de higiene permanente. En navegación, a la timonera, solo accederá el oficial de puente”, incluyó la propuesta enviada por la AACPPyP.

Para acordar estas medidas, el gremio solicitó una reunión en la nota remitida, pero indicó que al “no contar con respuesta alguna” decidió poner “en alerta al sector con el fin de no seguir exponiendo a los asociados a posibles contagios”.

En tanto, la conducción gremial decidió “disponer hisopados para capitanes y oficiales por cuenta y cargo de la asociación” y comenzar “a analizar con los afiliados parar las zarpadas a zona de pesca”.

La asociación reseñó que, al inicio del aislamiento obligatorio, cuando la pesca fue incluida dentro de los servicios esenciales y se acordaba un protocolo para la reactivación de la actividad, muchos aspectos sobre las medidas de seguridad sanitaria “fueron cuestión de debate”, y motivó que el gremio alertara entonces sobre “la situación que finalmente se desencadenaría”.

“La evolución de contagios no da márgenes para la dilación entre debates, se deben tomar decisiones de inmediato para evitar mayores complicaciones que pongan en riesgo la actividad de pesca. El enemigo es invisible, y día a día muestra su alto poder de contagio. Instamos y confiamos en que el sector empresario reaccionará sin actitudes mezquinas, con respeto y consideraciones de valor hacia sus trabajadores”, concluyó el comunicado de la organización gremial.