El sindicalismo, en general, no es un grupo homogéneo que lucha por las mismas cosas, defienden las mismas causas y pelean por las mismas conquistas. Más allá de cuestiones comunes a todos, como aumento salarial, Ganancia, derechos laborales y despidos, entre los argumentos más destacados que alinean a las organizaciones gremiales independientemente de su extracción política/ideológica, los problemas individuales, intereses y los partidismos dentro de cada sindicato, llevan irremediablemente a las divisiones, motivo por el cual hay dos CGT, hay dos CTA y así sucesivamente hasta vemos en el país gremios que están partidos internamente (Atech norte y sur).

Y a esta división apuestan los gobiernos de turno, tras el tradicional y antiguo lema “divide y reinarás”, porque siempre tienen un ala con quien negociar y si “debe pelear”, generalmente lo hace con un sector, tal vez de gremios menos poderosos, pero no contra un bloque monolítico que a cualquier gobierno le complica la existencia. Excepto, claro, que esa unidad sea conducida por alguien aliado al gobierno de turno y en se caso, tener a todos los gremios bajo el mismo paraguas es un co-seguro para desplegar una gobernabilidad sin alteraciones ni reclamos, lo que constituye una situación ideal, hoy pretendida por Alicia y sus colaboradores.

En Santa Cruz prácticamente una CGT desactivada, fue observada desde el poder como una oportunidad para generar un presión oficialista que en el futuro podría llegar a “planchar conflictos” o eventualmente negociar “en nombre y representación de todos”, cuestiones en general más favorables al Ejecutivo que a los trabajadores.

La idea, nació con la pretensión de poner al frente de este cúmulo de gremios, a quien fuera más representativo y “amigable” de Alicia Kirchner y por ese motivo, la cuestión fue debatida puertas adentro con la mano de Carlos Zanini, Pablo González y la opinión inexcusable de Teodoro Camino; todos amigos de quien pretenden imponer: Claudio Vidal, Secretario General del Sindicato de Petroleros Privados de la provincia de Santa Cruz.

En la sede del sindicato de Comercio, el 27 de septiembre, se hizo una reunión de todos las organizaciones participantes de esta propuesta de unificación y allí se debatió la conformación, pero posteriormente comenzó a sentirse el “operativo clamor” para dar por sentado que todos los integrantes de la nueva CGT provincial, están en un todo de acuerdo que el hombre indicado para liderar la organización, es Claudio Vidal, el petrolero. De hecho, un homónimo de él, pero perteneciente al SOEM, hizo declaraciones en un medio de “la cadena de la alegría” (asociada al gobierno), donde confirma esta premisa: “nos reunimos 27 gremios (de los 30 probables), hay una sola lista y todos apoyamos la conducción de Claudio Vidal”, dijo Daniel Vidal.

La realidad contradice a este trabajador municipal, por cuanto anoche, quince de esos 27/30 gremiosque mencionó Vidal, se reunieron en el Sindicato de Televisión de Río Gallegos para debatir, precisamente, que no estaban de acuerdo con que la conducción de la nueva CGT recayera en manos de Claudio Vidal, a quien consideran demasiado cercano al gobierno provincial y hay factores que gravitan sensiblemente en los sindicatos que tienen menos independencia que los petroleros, por ejemplo, del gobierno de Santa Cruz.

Un dirigente de uno de esos gremio que asistieron a la reunión, pero que no tiene peso específico por los pocos afiliados con los que cuenta en zona norte, le señaló a OPI “Lo que dicen es mentira, no hay consenso, como dicen por ahí, de que Claudio Vidal tenga tanto apoyo. Anoche se habló de poner seriamente en la mesa la discusión de quién conducirá la CGT y que no venga a dedo, como pretenden algunos”, indicó y luego agregó “anoche se le propuso a Juan Almada del Sindicato de Camioneros de Santa Cruz, que sea él quien se postule y Almada dijo clarito que si Claudio Vidal es electo para dirigir la CGT, su gremio se aparta porque no va a estar bajo la conducción de un dirigente que tiene en su haber la muerte de un joven de la UOCRA, hecho que nunca se aclaró”.

Nuestra fuente siguió dando detalles específicos de lo que anoche se habló en la reunión y para resumir, digamos que recaló fuertemente la idea de particionar la CGT, en caso de que la gente de zona norte insista con poner a dedo a Vidal y no se escuchen las opiniones de los demás. En ese marco, casi al finalizar el encuentro, los asistentes, representados en su mayoría por los Secretarios Generales, le propusieron a Juan Almada la conducción de la CGT “zona sur”, previendo que Vidal podría encabezar la CGT “zona norte”.

La fuente afirmó que el camionero no adelantó ninguna decisión, pero les advirtió que si piden por él, que sepan que no está entre sus planes acudir al llamado del gobierno para “arreglar” o “pactar cargos”, entendiendo que la libertad de la CGT vendrá de la mano de la libertad política que tenga quien la conduzca.

El dirigente que asistió anoche en representación de sus afiliados y nos confió los detalles de la reunión, criticó fuertemente a Vidal, por cuanto dijo que los trabajadores echados por San Antonio Internacional en zona norte de donde proviene y que la jueza Marta Rey de Capital Federal ordenó restituir, dijeron no haberse sentidos representados por el sindicato que conduce Vidal; sostienen que los dejaron solos y sin apoyo y solo la presentación judicial particular de Amparo que hizo el operario Marcelo Jaramillo, les devolvió la dignidad del trabajo a través del fallo de la Justicia.

El día 4 de noviembre, los participantes de esta unificación de la CGT tienen previsto la realización de un plenario de Secretario Generales,a llevarse a cabo en San Julián, donde, entre otras cuestiones se establecerá la fecha de las elecciones para la comisión directiva que regirá los destinos de esta nueva CGT en Santa Cruz.