En un giro inesperado que ha sacudido al sector portuario argentino, la Asociación del Personal de Dirección de Ferrocarriles y Puertos Argentinos (APDFA), liderada por Adrián Silva, ha alzado su voz en rechazo a la reciente ola de despidos que ha dejado a aproximadamente 60 trabajadores en la calle, según declaraciones del propio sindicato. La situación ha generado un profundo malestar en la comunidad laboral y ha movilizado a los afectados y a sus familias.

Los hechos se desarrollaron en la sede Puerto Madero de la Administración General de Puertos (AGP), donde los trabajadores se presentaron para cumplir con sus labores habituales, solo para ser informados de que no se les permitiría el acceso al organismo. Esta repentina medida dejó perplejos a los empleados, muchos de los cuales cuentan con décadas de servicio y una amplia experiencia en el ámbito portuario.

Los despidos, llevados a cabo sin una explicación clara por parte de la administración, han afectado a trabajadores de carrera, incluyendo personal técnico y jurídico, algunos de los cuales acumulan hasta 40 años de antigüedad en sus puestos. Este drástico recorte de personal ha despertado la indignación y la incertidumbre entre la comunidad laboral, que se encuentra ahora en una situación precaria y en busca de respuestas.

Ante esta coyuntura, la APDFA ha actuado con celeridad y determinación. Bajo el liderazgo de Adrián Silva, el sindicato ha convocado a una asamblea informativa en la que se declaró el estado de alerta y movilización. Se denuncia la falta de lógica y justificación detrás de los despidos, contraviniendo incluso lo estipulado en el Convenio Colectivo de Trabajo (CCT), que prohíbe la realización de despidos sin causa.

Además de la manifestación en la sede de AGP, se ha anunciado una reunión con las autoridades de la empresa para discutir la situación. Sin embargo, surgen dudas respecto a la idoneidad de las autoridades para abordar la problemática, especialmente en el caso del Interventor Gastón Benvenutto, cuya experiencia en materia portuaria es desconocida para muchos en el sector.

En este contexto, los trabajadores afectados han acudido al sindicato en busca de asesoramiento legal y sindical para enfrentar esta situación adversa. La falta de transparencia en los motivos de los despidos, según sostiene Silva, indica una clara orientación detrás de esta medida, que afecta directamente a la estabilidad laboral y al bienestar de las familias involucradas.

En conclusión, la denuncia de despidos injustificados por parte de la APDFA en AGP ha puesto de relieve la vulnerabilidad de los trabajadores del sector portuario y ha desencadenado un proceso de movilización y solidaridad en defensa de los empleos y los derechos laborales. La incertidumbre y la indignación persisten mientras se espera la reunión con las autoridades, en la que se espera que se esclarezcan los motivos detrás de esta polémica medida.

Este artículo refleja el clamor de los trabajadores afectados y su lucha por la justicia y la estabilidad laboral en un contexto de incertidumbre e inseguridad económica.