Este 1° de Mayo ha sido muy diferente por la coyuntura que está atravesando Argentina, especialmente para los trabajadores y las trabajadoras de la alimentación.
Por: Héctor Morcillo*
El gobierno de derecha de Javier Milei busca implementar un feroz modelo neoliberal de concentración económica y un ajuste terrible en contra de los más pobres y desfavorecidos.
En medio de este escenario, el 30 de abril el Congreso aprobó la llamada Ley Bases, que pretende, entre otras cosas, enajenar el patrimonio nacional dándole absoluta libertad a los capitales concentrados, a las empresas transnacionales y a los sectores especulativos financieros para dilapidar el patrimonio de los argentinos y quedarse con la riqueza.
Esta ley refuerza la libertad absoluta del mercado, el monopolio, que en nada favorece al pueblo en su conjunto.
Es una ley que profundiza un ajuste fiscal terrible por el cual los más perjudicados son los jubilados y el sistema previsional.
Con bombos y platillos se habla del superávit fiscal a costa de sacarles el 35 por ciento de los ingresos a jubilados y pensionistas.
La ley también deroga la posibilidad de retirarse con el reconocimiento de los aportes y contribuciones haciendo un cálculo propio, lo que genera que los trabajadores no puedan prever su jubilación.
Mujeres jubiladas, las más perjudicadas
Ello afecta principalmente a las mujeres.
Nueve de cada diez mujeres no cuentan con aportes suficientes para acceder al sistema jubilatorio y con esta ley esa posibilidad se elimina totalmente.
La reforma laboral favorece a su vez a los grandes capitales y sigue profundizando la pérdida de derechos de los trabajadores y las trabajadoras, abriendo las tranqueras a la tercerización y precarización de las relaciones laborales y creando la figura de monotributo para aquellas empresas con hasta cinco trabajadores, negándoles de esta forma cualquier tipo de derecho.
Esta es una ley que pone patas arriba a la Argentina, que tiene como concepción principal eliminar la justicia social y apunta en dirección de una mayor concentración del capital en manos de los que más tienen.
En ese marco nuestra Federación, en su congreso, recientemente celebrado, definió junto a todos sus sindicatos afiliados apoyar el plan de lucha elaborado por la CGT en conjunto con el resto del movimiento obrero.
La movilización, única salida
Participamos activamente en la movilización del 1º de Mayo, convencidos que la única manera de parar esto es en las calles, pacíficamente, organizados pero contundentes, como pasó también con la marcha en defensa de la educación, libre, gratuita y pública realizada el pasado 23 de abril.
Tuvimos una importante presencia en la marcha convocada por la CGT en Buenos Aires, con la participación de las filiales locales y algunos representantes del interior. El resto nos movilizamos en otras provincias de la República.
En Córdoba realizamos una caravana multitudinaria que terminó en un acto en el Patio Olmos, donde se congregaron otros movimientos y organizaciones sociales de campo popular.
Esto marca el camino de lucha, que continúa con la convocatoria a un gran Paro Nacional para el 9 de mayo, y marca una decisión política del movimiento obrero de enfrentar estas medidas de ajuste.
Una casta intacta
No podemos permitir que este ajuste recaiga, no en la casta, como prometió y proclamó el presidente Milei, sino en los jubilados, los trabajadores y los más pobres.
La casta está intacta, la casta financiera, la casta monopólica, la casta que fija precios, a la que se le ha otorgado total libertad para continuar aumentando el costo de todo, para que día a día los salarios de los obreros pierdan poder adquisitivo.
A esa casta se le ha dado libertad para negar las negociaciones paritarias nacionales.
Todo esto estamos enfrentando con este plan de lucha.
Este 1º de Mayo no fue un día de celebración. Fue un día de lucha del conjunto del movimiento obrero.
En nuestra organización sigue intacta la esperanza de la construcción de un mundo con justicia social e inclusión para todos y todas.
*Secretario general de Federación de Trabajadores de la Industria de la Alimentación (FTIA) y vicepresidente de la UITA.
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