A pocas horas de que la Cámara de Diputados de la Nación inicie el debate de la Ley Bases, este medio dialogó con el secretario General de la Asociación Personal Jerárquico de Bancos Oficiales (APJBO), Arturo Quiñoa, cuestionó la política del gobierno de Javier Milei para con los trabajadores.

“Este momento actual donde el Gobierno insiste con restituir el impuesto a las ganancias, un articulado dentro de la Ley de Bases, a nosotros hay un par de cosas que nos hacen ruido, que no entendemos, porque si el Gobierno propone el RIGI para que haya mayor inversión en el país, más beneficios, o sea, en base a medidas de tipo fiscal que alientan a invertir con exenciones con tributos que se pagan las alícuotas reducidas con toda esa serie de beneficios, por qué los trabajadores en vez de obtener beneficios y reducción de impuestos, al contrario, tenemos incremento de impuestos”, analizó el dirigente gremial.

En caso de aprobarse la vuelta del impuesto a las Ganancias, el gremio calcula que se sumarían un millón de trabajadores a pagar dicho gravamen. Y sumó: “Hay empresas como Mercado Libre que tiene un beneficio por extensiones impositivas de 100 millones de dólares en el 2023. ¿Hay que darle beneficios a mercado libre para que pueda producir y competir? ¿O es una empresa grande que ya tendría que pagar impuestos como el resto de las empresas del sistema?”.

En ese sentido, Quiñoa denunció que “hay beneficios para uno y castigos para otro: los beneficios son para los empresarios ricos y los castigos son para los trabajadores, nos castigan porque somos los trabajadores que ganamos más”.

Trabajo y esfuerzo

“Ganamos más porque estamos capacitados, porque trabajamos en tareas que no cualquiera las puede hacer”, subrayó el líder de la APJBO. Además, señaló que hay una serie de características del salario que va en función a lo que producimos. “Somos los trabajadores de las empresas que tienen mayor productividad, entonces es lógico que nuestros salarios sean mayores”, agregó el dirigente.

Sin embargo, el líder de la APJBO indicó: “en vez de premiar el esfuerzo del trabajador, a cada persona que se capacita, que busca tener un rendimiento mayor en su actividad, por el contrario, se lo castiga y eso desalienta. A su vez, se preguntó: “qué trabajador va a querer superarse, si es un castigo superarse. Entonces vamos a tener problemas a futuro en que no vamos a tener mano de obra calificada para determinadas tareas porque se desalienta ese crecimiento profesional, laboral, ese esfuerzo hacer horas extras, cubrir guardias rotativas”.

“Los empresarios no nos regalan nada, sino que a base de lucha nosotros conseguimos que nos paguen mejor a base de lucha esfuerzo y años se consiguió que nos reconozcan nuestras capacidades y habilidades que nosotros ponemos en favor de las empresas”, resaltó Quiñoa. Al tiempo que vociferó: “el Gobierno insiste en que los trabajadores somos la casta, que los trabajadores somos lo que tenemos que pagar una fiesta a la que no nos invitaron”.

¿Cómo se sigue?

En esta conyuntura el dirigente gremial adelantó que la idea es seguir trabajando en conjunto con el Frente de Gremios Estatales, con la Mesa Sindical El Salario No es Ganancia y con el resto de los gremios, con quien comparten la defensa de los derechos de los trabajadores.

“No vamos a bajar los brazos ante los diferentes ataques que realiza el gobierno contra los trabajadores, avasallando las determinaciones que emana el Poder Legislativo, creemos que la solución de los problemas que enfrentamos los argentinos se basa en el diálogo y en respeto de todos los sectores y no con bravuconadas de un standapero”, concluyó Quiñoa.