La Asociación Bancaria (AB) que lidera Sergio Palazzo expresó su rechazo al acuerdo del Gobierno Nacional con la fintech Ualá para dar créditos a pequeñas y medianas empresas, algo que calificó como «inadmisible».

Por medio de un comunicado de prensa, el gremio manifestó «nuestra profunda preocupación por la decisión del Ministerio de Desarrollo Productivo en la que acuerda una línea de crédito para pequeñas empresas a través de la aplicación Ualá».

Y calificó como «inadmisible que, en lugar de canalizar la inclusión financiera y los créditos de las PyMEs a través de la Banca Pública y dentro del sistema, se realice un convenio con una empresa totalmente informal que ni siquiera es un banco y se destinen millones de pesos para tal efecto».

En ese sentido se remarcó que «una decisión económica de orden nacional no debe ser realizada a través de una aplicación. Esas operaciones de alta relevancia para la economía de nuestro país deberían ser canalizadas únicamente, y como corresponde, a través de la Banca Pública».

Además, se recordó que precisamente las «cartas orgánicas» de la banca pública «establecen entre sus fines principales atender las necesidades de las pequeñas y medianas empresas».

La denuncia de Bancarios sobre Ualá

Más allá del comunicado, una fuente de los bancarios aseguró que «Ualá está haciendo negocios con dineros públicos. La tasa no es accesible en relación a este tipo de préstamos que debería ser una asistencia financiera, con un fin social».

Y apuntó que «se desvía el espíritu de este tipo de créditos, teniendo además bancos públicos para hacerlo que en sus cartas orgánicas contemplan este tipo de asistencias».

La preocupación del gremio respecto al tema de las fintech es algo de vieja data. Desde hace un tiempo, le vienen reclamando al Banco Central que regularice una situación que actualmente se encuentra en un gris legal, de acuerdo a la normativa que deben cumplir las entidades financieras.

En varias oportunidades el propio Palazzo hizo una alusión a Mercado Pago, que puede ser extensible a otras empresas de similares características, expresando que «abren cuentas, toman depósitos y otorgan créditos. Cumplen las funciones de cualquier banco».

En esa línea es que reclaman el adecuado encuadramiento de esos trabajadores, además de advertir por los riesgos de los usuarios de operar con dinero que entidades que no tienen los resguardos y regulaciones establecidos por el Banco Central.

Los detalles del acuerdo con la fintech

Estos reclamos, claro está, salieron a escena cuando el fin de semana el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación anunció el acuerdo con Ualá, que presta servicios financieros a través de una aplicación.

Desde la cartera conducida por Matías Kulfas informaron que se aportará mil millones de pesos mediante un fondeo del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (FONDEP), «para fortalecer la inclusión de microcréditos de la compañía destinados a la realización de inversiones productivas y promover el acceso al financiamiento de más personas».

Esa cifra se podrá monetizar en hasta tres desembolsos, los cuales serán solicitados por la entidad de acuerdo con el grado de colocación de la línea de créditos destinados a la realización de inversiones productivas.

De esa forma, se añadió, «Ualá otorgará créditos a quienes desarrollen actividades productivas, que irán desde los $5.000 hasta los $200.000 por beneficiario, a una tasa de interés fija del 40%, en un plazo de hasta 18 meses. Los créditos serán destinados a financiar la compra de herramientas, materiales e insumos».