Por: Luis Autalan.

El titular de la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (Uthgra), Luis Barrionuevo, avaló que la relación de los gremios con el gobierno recorra todos los canales de diálogo más allá de los tópicos que viene desarrollando la Casa Rosada.

El dirigente cumplirá esta semana su tradicional convocatoria en Mar del Plata para una jornada política y sindical. En la previa a ese foro destacó la tesitura dialoguista de la CGT para la era libertaria e incluso recordando la proximidad que supo tener con Javier Milei en la campaña electoral de 2023, el cual incluyó convocatorias en Parque Norte con empresarios.

“Lo que tienen que entender el gobierno y el presidente es que agrediendo no se logra nada, yo creo que hay que conversar todo”, sustanció en declaraciones radiales. En cuanto a la convocatoria del viernes 7 en la ciudad balnearia, el gastronómico la convocó como referente del movimiento nacional sindicalista, y según confirmaron desde la Uthgra a BAE Negocios, para tal ocasión lanzará su propio espacio político. Allí incluso remarcaron la presencia de otros sindicalistas para el evento, representantes de los sectores de la juventud, mujeres y jubilados. Para esa jornada está prevista una conferencia de prensa en el hotel que los gastronómicos poseen en la calle Tucumán al 2.600.

La cita se enmarca no sólo en la cita veraniega que Barrionuevo suele desarrollar en Mar del Plata, sino también en que este año, dentro del calendario político, está signado por elecciones.

La injerencia de Barrionuevo respecto a otros sindicatos viene de los tiempos donde lideró la denominada CGT Azul y Blanca, que en la era kirchnerista terció tanto con la central obrera que lideró Hugo Moyano y la afín al gobierno de Cristina Fernández al comando de Antonio Caló.

Hoy su rango de influencia se aprecia incluso en foros gremiales que no están ligados a la actividad gastronómica, como en la falange transportista de la Unión General de Asociación de Trabajadores del Transporte (Ugatt) donde se agrupan algunos sindicatos de su confianza o los aceitados lazos con el triunviro cegetista Carlos Acuña.

En cuanto a enfoque sobre el presente de la central de Azopardo también dejó una opinión direccionada a quienes desde esa estructura pretenden otro rol cegetista. “Lo que ocurre hoy, lo que ocurrió puntualmente con este caso es que a lo mejor el pibe Moyano (Pablo) quiere ser más revolucionario y demás, por eso el papá lo separó, lo sacó de la conducción, pero la CGT es una sola, y lo que les digo es que hoy por hoy, creo que hay que dialogar”.