Lo aseguró el líder del sindicato, quien, además, lo graficó detallando que 7 de cada 10 empleados, son pobres.
Tras los datos registrados por la inflación de febrero 4.7% y en alimentos un 7.5%, marcan una variación de la canasta básica como la más alta de los últimos 11 meses, estos indicadores afirman que las mayores subas se dieron en alimentos que, en consecuencia, los más castigados son los trabajadores de menores ingresos y salarios que estén por detrás de la inflación.
Este bimestre representa la continuidad de un plan que se afianza más allá de la pandemia y los conflictos de la invasión rusa.
En el sector de comercio y servicios el 70% de los empleados no cubren los ingresos básicos y están por debajo de la línea de pobreza ($85.000), siete de cada diez empleados de comercio son pobres.
Desde el gremio, este año ha comenzado una propuesta y un plan de trabajo para recuperar el salario. Y no es un dato menor ya que desde el comienzo de la pandemia se hizo un trabajo colaborativo con empresarios y comerciantes, en el que la prioridad fue mantener el empleo, trabajamos codo a codo con las PYMES y Supermercados, el trabajador fue esencial y cumplió por demás una etapa de alto riesgo desde el comienzo del Covid-19. Fueron dos años que el trabajador no pudo mejorar su sueldo.
Ninguna ciudad empobrecida puede crecer con Planes Sociales, sub empleo o evasiones impositivas.
Al respecto, el secretario general del SEC, Alfredo Beliz aclaró que “no hay camino hacia la recuperación salarial para mejorar el humor de la sociedad que viene hace 2 años poniendo todo su esfuerzo, una calidad de vida deteriorada y un futuro incierto”.
Y agregó: “La falta de sensibilidad para percibir la opinión social, las entidades gremiales que estamos comprometidas a dar batalla contra los ajustes y errores de la economía, y que hoy medio país se encuentra pobre y sin salida. El trabajo es el gran ordenador social y el salario digno es el compromiso y bienestar para una comunidad organizada”.
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