El grupo planteó preguntas sobre el aumento de los accidentes laborales debido a fugas de amoníaco en los frigoríficos, que pueden causar desde lesiones en la piel y problemas respiratorios hasta la muerte, dependiendo de la gravedad de la fuga.

Fue una oportunidad para solicitar más acciones de prevención y fiscalización en los frigoríficos, relató Artur Bueno Júnior, de la CNTA.

Josimar Checcin enfatizó que las organizaciones sindicales deben estar atentas a los problemas reportados por su base, y que cada vez se escuchan más relatos de fugas de amoníaco, tanto por parte de los trabajadores como por noticias de la prensa.

Pedro destacó que existe un marco normativo básico que necesita ser mejorado, pero que incluso el texto actual proporciona una base sólida para que la fiscalización por parte de los organismos públicos pueda implementar acciones que mejoren esta situación.

Reforzar las fiscalizaciones

Entre las propuestas presentadas a Araújo destacó la reactivación de las Brigadas de Fiscalización en los Frigoríficos.

Roberto Ruiz reclamó a su vez revisar lo establecido en la Norma Reguladora 36 (NR 36) en el tema del amoníaco, ya que el texto actual, dijo, necesita ser perfeccionado.

Araújo agradeció al grupo, enfatizando que está abierto a recibir propuestas que mejoren los estándares de seguridad y salud en el trabajo.