Este martes a la mañana representantes de CaIPA y el SOIP rubricarán el acuerdo alcanzado ayer lunes, luego de una reunión celebrada en la cámara patronal en que definieron las bases de lo que será la actualización salarial para los obreros bajo convenio colectivo 161/75 y el Anexo Pyme en 2019.

Las partes acordaron un incremento del 20% a partir del 1 de marzo pasado, una segunda cuota del 15%, no remunerativo sobre los valores a febrero de 2019 y el compromiso de volverse a sentar a la mesa de negociaciones en el mes de octubre para evaluar el nivel de inflación.

El año pasado desde la cartera de Trabajo, cuando todavía Triaca era ministro, prohibieron las sumas no remunerativas en los acuerdos paritarios. Fue mediante el Decreto 633 y la medida apuntaba a resguardar “los recursos genuinos destinados a la seguridad social y a fin de garantizar la sustentabilidad del régimen previsional”, según los considerandos del decreto.

La medida tuvo poca vigencia. El mismo Gobierno acaba de anunciar por estas horas la flexibilización de las negociaciones salariales y en ese marco, autorizar los pagos no remunerativos.

Los detalles del acuerdo fueron confirmados por Cristina Ledesma, secretaria General del sindicato que agrupa a los trabajadores del pescado en Mar del Plata, luego de la reunión.

“Creemos que es un paso adelante para la recomposición salarial de nuestros compañeros haber llegado a un acuerdo sin tantas demoras”, reveló la dirigente en tanto reconoció que más allá del porcentaje acordado, “lo que necesitamos es mejorar el trabajo. Si hubiese trabajo los aumentos se sentirían de otra forma”, aseguró.

A diferencia de otros años esta vez la patronal y el sindicato resolvieron pronto la discusión paritaria como tiempo atrás también habían acordado la bonificación extraordinaria de la ayuda escolar.

Todavía restan un par de encuentros más para llegar a un acuerdo en los valores de la producción de langostino. La patronal entregó números inferiores a los presentados oportunamente por el sindicato, pero desde ambos sectores se mostraron confiados en poder encontrar un punto medio para avanzar en el acuerdo final.

Hay algunas empresas adheridas a CaIPA interesadas en reprocesar langostino en tierra y en el gremio ven en ese interés la posibilidad de establecer un marco general que oficie de piso y que sirva para la creación de nuevos puestos de trabajo.