Hasta acá llegamos, no vamos a permitir que sigan boludeando a los laburantes”, anunció el moyanista.

Un secretario general provisorio desde hace 11 años, que no convoca a elecciones ni presenta al Ministerio de Trabajo los papeles para estar al frente del gremio, causas en la Corte Suprema desde hace 7 años, indefiniciones políticas y judiciales, una obra social intervenida, quebrada que recauda y no da prestaciones, son algunas de las asombrosas particularidades del gremio que nuclea a los trabajadores de seguridad privada, UPSRA.

Y eso no es todo, ahora la intromisión del Sindicato de Empleados de Comercio que pretende “robarle” el encuadre de los trabajadores de seguridad electrónica, pone en jaque y caldea los ánimos en la seguridad privada.

“Y si seguimos con la lista, contabilizamos también que hace un tiempo se formó una Federación con gremios del interior y que al día de hoy esta desarmada, algunos de esos gremios continúan actuando bajo ese nombre y se aliaron con la ex mujer de Ángel García quien se presenta como “apoderada” de UPSRA, y además se encarga de firmar paritarias en nombre de un Secretario General ilegítimo”, expresó una fuente del Bloque Nacional, la organización sindical con mayor convocatoria en la provincia de Buenos Aires. “Ese conglomerado de personajes sin representación ahora vienen por el convenio colectivo de trabajo, y lo peor es que lo pretenden hacer a espaldas de los trabajadores. Lo raro y preocupante es que no mencionan que modificaciones intentan hacer, pero con los antecedentes de 40 años de entrega de derechos, lo más probable es que sea aún peor que el actual y favorezca a los empresarios”, vaticinaron.

Al respecto, el Bloque Nacional emitió un duro comunicado donde expresó “su profunda preocupación por los intentos de modificar el convenio colectivo de trabajo por parte de una Federación desarmada con escasa representación en el territorio nacional, junto a una apoderada sin legalidad para firmar nada. Resulta preocupante el repentino apuro de empresarios y sectores gremiales que históricamente actuaron en detrimento de los trabajadores por modificar el CCT, justo en un año donde deben haber elecciones en UPSRA. Cualquier modificación debe ser introducida por la nueva conducción, no debe ser hecha por los que están a punto de irse.”, enfatizaron.

Y continuaron: “Unos pocos no pueden hablar en nombre del total de los trabajadores: mucho menos actuar a espaldas de ellos, sin siquiera informar en qué consisten las modificaciones que están queriendo introducir en el convenio. En tal caso, sería saludable para las instituciones y la democracia sindical, que los actores que quieren modificar los convenios, convoquen a todos los sectores y a los trabajadores de la seguridad privada y que las decisiones no sean tomadas unilateralmente por 6 o 7 actores que no representan la voluntad mayoritaria.”

Como punto final, la organización sindical anunció que “Se declara en estado de alerta y movilización hasta tanto no se incluyan a los trabajadores y a sus legítimos representantes en la discusión. Nuestra historia de lucha contra los dirigentes traidores que vendieron los derechos a los empresarios de la seguridad privada, es la garantía para los trabajadores que no vamos a permitir que se continúe y/o se profundice el modelo de flexibilización de los últimos 40 años.”