En este contexto, López solicitó una reunión en carácter de urgencia con el líder de la CGT, Pablo Moyano, a fin de exponer la situación de la obra social y del gremio donde, con la venia del dirigente de la central obrera, se trazó un contundente plan de acción que arrancará a la par del comienzo del 2023: "Demostramos todo el 2022 la voluntad por normalizar una actividad plagada de curiosas indefiniciones, UPSRA es el único gremio que aún no fue normalizado después del intervencionismo macrista en las entidades gremiales, ¿porque?" Se pregunta López dejando abierto un paragua de suspicacias y dudas. "Demostramos todo el 2022 que tenemos una estructura gremial nacional capaz de obrar en beneficio de los vigiladores, demostramos gestión, el acompañamiento tanto de los trabajadores que bancan este proyecto, como de muchas organizaciones sindicales que ven con buenos ojos la unidad y el trabajo en conjunto que venimos llevando a cabo con Leónidas Requelme, el Bloque Nacional comenzó a auditar el ordenamiento de una obra social quebrada que no prestaba salud a sus afiliados, pese a ello, aparecen actores interesados con retrotraer la situación de OSPSIP a épocas anteriores donde se dejó morir a los trabajadores cuando no tenían prestaciones ni cobertura médica, ¿porque?" Vuelve a preguntar López. Consultados al respecto, desde el área de Prensa del Bloque Nacional informaron que "hay sectores políticos donde participan altos funcionarios de Casa Rosada e influencias de los que hundieron la actividad los últimos 40 años, financiados por un sector empresarial que tienen intenciones de obtener su porción de torta de la caja del gremio y la obra social. La reunión fue para hacer un resumen de la situación actual de la actividad y de la intención de Christian López para empezar a  jugar fuertemente en la vida gremial de UPSRA por el pedido de muchos trabajadores que ven en su imagen a un dirigente con la capacidad y coherencia necesaria para sacar a la actividad adelante. Existe un interés común por hacer de la seguridad privada una actividad digna y la pelea clave será el 2023. De eso se trató el encuentro con Pablo Moyano" expresaron.

En cuanto al balance del 2022, remarcaron que a pesar de los escollos, "fue un año positivo para la consolidación gremial del Bloque: la unidad entre los dirigentes López y Requelme y sus organizaciones sindicales esta mas fuerte que nunca” expresaron. “Inclusive, aún sin participación plena en la discusión paritaria, logramos presionar gremial y políticamente para destrabar las firmas de los cuatro acuerdos que tuvo este año atípico y que algún sector empresarial se mantenía obstinado en ofrecer aumentos inferiores a los pactados. Si bien seguimos debajo de la línea de la pobreza, si los empresarios no hubiesen sentido la respiración en la nuca de nuestra organización, sin dudas hubieran firmado acuerdos inferiores con sus socios gremiales. La lucha del Bloque Nacional es esa: contra los empresarios que pretenden sumar ganancias a costa de flexibilizar cada vez más a los vigiladores y contra históricos espacios gremiales que recibieron durante años favores patronales a cambio de vender nuestros derechos" explicaron, dejando en claro los desafíos que enfrenta el Bloque Nacional quien logró cerrar el año con la firma de importantes bonos para sus afiliados en varias empresas. "Durante el 2022 también hubo elecciones en CAESI, recordemos que algunos sectores gremiales que actúan en detrimento de los vigiladores intentaron poner candidatos afines a sus intereses, en esa ocasión también presionamos políticamente para que eso no ocurra y lo logramos", expresaron desde la organización sindical que estuvo cada día del año recorriendo incansablemente los objetivos donde prestan servicios los vigiladores y que contabilizó casi 200 acciones gremiales durante el 2022, algo así como una medida cada día y medio. "Esos números demuestran el descalabro y la crítica situación que atraviesa nuestra actividad ante un estado que mira para otro lado". Resaltando uno de los logros mayores del 2022, expresaron que "en el segundo semestre del año, las antiguas administraciones de OSPSIP acusadas de desaparecer 1000 millones de pesos de la obra social, movieron fuertemente sus contactos políticos para recuperar el control de la prestadora de salud intervenida en 2020 y casi lo logran. El Bloque Nacional tuvo una participación fundamental para impedirlo y al fin se logró una gestión normalizadora en la obra social nombrada por el Presidente y la Ministra de Salud, en este punto el interventor designando, Jorge Banegas, comenzó a trabajar fuertemente para devolverle la salud a los trabajadores y sus familias. El rol del Bloque Nacional es auditar constantemente que los afiliados sean beneficiarios de una gestión correcta. Aun así, la batalla no ha concluido ya que seguimos haciendo frente a oscuros intereses que quieren meter mano en la caja de los afiliados" subrayaron desde la organización gremial que batió récords este año en la entrega de beneficios para sus afiliados: cajas navideñas, regalos, kits escolares, eventos y más. “y el 2022 no será nada comparado con el próximo año, tenemos la convicción de darle la dignidad a los trabajadores que les robaron durante años, este 2022 demostramos que la fuerza que tenemos para lograrlo es imparable.”

En cuanto a las acciones para el 2023, dejaron en claro que no se tomarán descanso: "estaremos levantando la copa para desearles un feliz año a nuestros seres queridos e inmediatamente después saldremos a la cancha con una contundencia que hasta ahora nadie vio. No hay descanso, ni vacaciones, ni feria judicial que detenga nuestras intenciones por recuperar la actividad: vamos con todo y por todos" sintetizaron.