Claudio Moroni fue uno de los apuntados por el arco del Frente Sindical por retrasar expedientes y no entregar certificados de autoridades por ejemplo, a Voytenco
La punta de lanza fue la UATRE, que ayer todo el arco del Frente Sindical apoyó en su búsqueda del certificado de autoridades que raramente Claudio Moroni, ministro de Trabajo de la nación, le hace desear.
José Voytenco es el sucesor de una sucesión de hechos desafortunados en la UATRE. Primero el “Momo” Venegas, después Ramón Ayala, después conflictos institucionales (ya fueron subsanados) y ahora el dilema se instaló en Alem 650, órgano de aplicación en el sistema laboral argentino, desde donde debería haberse expedido un certificado de autoridades que declare al chaqueño como secretario general de la UATRE luego de haber obtenido el voto de la mayoría de los rurales. Extrañamente, Moroni lo planchó y aun no lo entrega.
Desde allí, comenzó una lluvia de críticas desde muchas de las 70 organizaciones gremiales que se hicieron presentes en la sede de la escuela sindical de UATRE. Moroni fue un blanco clarito de diferentes dirigentes que criticaron la “inacción” del funcionario laboral para expedirse en trámites y burocracia que deberían salir rápido. Homologaciones de paritarias, certificados de autoridades de los gremios, cuya necesidad imperiosa pasa el normal funcionamiento institucional, del acceso a sus cuentas, de poder pagar, de poder cobrar, de poder funcionar, de poder encender el motor de la obra social. ¿Por qué? Muy sencillo. Porque de ello dependen miles de trabajadores y trabajadoras que se les vence un bono, que necesitan que les deriven los aportes al gremio. De tener una cobertura. Que el gremio pague los prestadores médicos. Que se lleven adelante los organismos gremiales para que el sindicato no se detenga.
https://twitter.com/SonidoGremial/status/1511421641355628555
Desde el Ministerio de Trabajo aun no se expidieron ni por el caso UATRE, ni por ninguno de los que ayer pusieron sus quejas sobre la mesa. Uno de ellos fue el propio Pablo Moyano, que ejemplificó con su arremetida cuando movilizó al Ministerio de Salud por la permanencia del Covid como enfermedad profesional.
Ayer, en la reunión del Fresimona, no se deslizó la posibilidad de accionar sindicalmente contra el ministerio ni Moroni, ya que el horno no está para bollos; pero los consultados admitieron que no se descarta. De hecho, desde el Sindicato de Comercio de Capital, con Muerza a la cabeza, se les ocurrió algo parecido a lo que sucedió durante 48 horas con las organizaciones sociales y que puso en alerta al Gobierno, pero nada más que en lugar de hacerlo por todo el centro porteño, clavarían las estacas en Alem al 600. Aun no hay definiciones tampoco sobre eso.
Uno de los consultados le dijo a este medio: “Moroni es uno de los funcionarios que no funcionan”. Y así, el ministro ganó algunos enemigos más. Lo que habrá que saber si esto puede traer más problemas para alguien que les sobran y hasta el momento le está costando administrarlos: Alberto Fernández.
Comentá la nota