Los gremios sostuvieron que "hubo una continuidad en los lineamientos centrales de la política educativa de ajuste y precarización, con una profundización y vaciamiento de las condiciones laborales, pedagógicas y salariales docentes".
El Sindicato de Trabajadores de la Educación Pampeana y el Sindicato de Escuelas Hogares y Rurales anunciaron un paro y movilización para el 1 de marzo, día de inicio de clases en la provincia, tras enumerar una extensa lista de reclamos y sostener que no están dadas las condiciones para el comienzo del ciclo lectivo. El mismo día realizarán una concentración en la Plaza San Martín de Santa Rosa.
Las organizaciones sindicales dirigidas por el piquense Christian Rosso (SiTEP) y Bruno Paoli (Escuelas Hogares y Rurales) pidieron una vez más el reconocimiento por parte de la Provincia para sentarse a la mesa de discusiones junto a los demás gremios.
A través de un comunicado conjunto, sostuvieron que "el año en curso no deja de deteriorarse con la escalada inflacionaria a nivel nacional y provincial. Hubo una continuidad en los lineamientos centrales de la política educativa de ajuste y precarización, con una profundización y vaciamiento de las condiciones laborales, pedagógicas y salariales docentes".
Y recordaron en esa línea que "la pauta salarial y la 'cláusula gatillo' han sido definidas en los últimos años por la Mesa Intersindical, y no por los sindicatos docentes reconocidos por la patronal".
Ampliación horaria
Observaron luego que "las medidas como ampliar la jornada laboral en la 5ª hora en Primaria, se justifican con los preocupantes índices de las evaluaciones estandarizadas, al servicio de señalar a la docencia como responsable del bajo rendimiento escolar. Como si el drástico incremento de la pobreza, con un 50% de menores pobres, no tuviese que ver con determinar las condiciones para desenvolver el proceso de enseñanza-aprendizaje".
Advirtieron en ese sentido que "si se promueve la extensión horaria, no podemos dejar de mencionar la necesaria revisión del nomenclador que castiga a la maestra de grado, como a los que ejercen cargos (auxiliares, especiales, asesorías pedagógicas, etc.), que trabajan más horas que las que les remuneran".
Aseguraron que "este planteo choca con la realidad del cierre de escuelas rurales y hogares y sus cargos, que se implementa con el impedimento a la libre inscripción/ingreso en dichas escuelas, y se 'disfraza' con el cambio de modalidad (jornada completa o con horario extensivo) y el traslado de los cargos a las ciudades más grandes (vaciando de trabajo y personas al interior de nuestra provincia)".
Situaciones límites
Por otra parte, el SiTEP y el Sindicato de Escuelas Hogares y Rurales afirmaron que "se necesitan cargos y equipos interdisciplinarios para atender las situaciones límites que se viven en las escuelas y colegios, que muchas veces se visibilizan en violencia física. Del mismo modo, que los cargos creados como los de preceptoría en jardines de infantes, incluyen la higienización de pequeños (cambio de pañales), cuestión delicada que debe tratarse en contexto de la ESI y los derechos laborales".
"Párrafo aparte merece el inicio de clases con altísimas temperaturas, sin tener las escuelas las condiciones para habitarlas, con el solo afán de contabilizar días de clases", cuestionaron, y sumaron en ese sentido que "las designaciones virtuales, lejos de optimizar el sistema, generan jornadas maratónicas de incertidumbre, con desconsideración del tiempo y conexión de los docentes".
Por último, las agrupaciones reclamaron "por libertad y democracia sindical, por el reconocimiento de las organizaciones sindicales (SERyH y SiTEP), como el reconocimiento a la conducción de la seccional Santa Rosa de la lista Rosa-Verde".
Con estos planteos, convocaron a una concentración a desarrollarse el 1 de marzo a las 18 horas en la plaza San Martín de Santa Rosa, con la premisa "que la dignidad docente supere al maltrato y la subordinación".
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