-La mano viene bastante complicada…

-Sí, y con un ensañamiento particular del nuevo presidente contra los trabajadores y trabajadoras.

El gobierno de Javier Milei está tratando de sacar una ley que incluye otros cientos de leyes en sí misma, algo absurdo que habla de la torpeza y falta de experiencia del Ejecutivo y su perfil autoritario.

El gobierno salió con los tapones de punta y especialmente contra la clase obrera.

Fijate que hay un decreto que señala que no se pueden reunir más de tres personas sin informar al Ministerio del interior, algo que nos remite a épocas de la dictadura.

-Hoy, ¿qué pasa…?

-Saldremos todos los trabajadores y trabajadoras a las calles, un lugar de donde nunca debimos haber salido.

Como peronista me siento avergonzado, porque fuimos inoperantes en estos últimos tiempos y eso nos costó caro. La gente se hartó de muchas cosas y en esa desesperación decidió ir tras la propuesta de Milei aun sabiendo que no era la mejor salida.

Esperemos que el presidente recapacite y revea sus propuestas porque el contenido de las nuevas leyes afecta a toda la sociedad, a la cultura, a los jubilados. Los trabajadores son los que más la sufren, pero no son los únicos afectados.

“Los obreros ya no pueden comprar carne”

Recién terminamos una reunión de negociación paritaria y hay preocupación también en el sector empresarial. Para la industria frigorífica también el escenario es incierto. Hay una merma significativa en el consumo per cápita debido a la caída del poder adquisitivo de los trabajadores.

Ya los obreros no pueden comprar carne, algo completamente injusto, porque, además de generar la riqueza, los trabajadores y trabajadoras son los únicos que la gastan.

-Para este gobierno los trabajadores y sus organizaciones en vez de ser parte de la solución son parte del problema…

-Sí, y apuntaron mal. Los enemigos no somos nosotros, los trabajadores y las trabajadoras somos los que podemos ayudar al país a salir de la crisis pero para eso tenemos que tener poder adquisitivo y derechos garantizados.

Hasta hace unos meses habíamos logrado mantener salarios como para subsistir, ahora ni eso, hay miles de jubilados que ya no pueden siquiera acceder a sus medicamentos. La situación es insostenible, inhumana.

Argentina Sociedad Anónima

-Detrás de Milei está el sector financiero, las corporaciones económicas y los sectores más acaudalados del país.

–Milei es el mascarón de proa de grandes grupos financieros. La prueba está en que (Mauricio) Macri se unió a él y ha conseguido puestos en este gobierno.

Los grandes poderosos que festejan a Milei son los que quieren apropiarse de nuestros recursos naturales, del litio principalmente, el gas y hasta el fútbol quieren privatizar y vender. El gran objetivo es vender el país.

-Se dice que los argentinos son de amores cortos.  Seguramente hoy en la movilización participará gente que votó a este gobierno.

-Lamentablemente, y lo digo con dolor, sí, porque hubo al menos un 50 por ciento de trabajadores y trabajadoras que lo votaron y ahora están sufriendo las consecuencias.

En nuestros locales sindicales se acercan a diario para pedir ayuda compañeros que no tienen ni para el gas. Estamos viviendo eso todos los días y todavía el gobierno nos quiere sacar los pocos aportes que tenemos sobre todo en lo referente a la obra social.

Una sociedad médica prepaga para una familia promedio está costando alrededor de 300 dólares o más en Argentina, cuando el salario mínimo nacional no llega a esa cifra.

Por el bien mayor

-¿Qué expectativas tienen hoy?

-Espero que sea una de las mayores movilizaciones populares en reclamo de mejores condiciones de vida para la mayoría del pueblo argentino.

Es hora de dejar de lado los personalismos y las diferencias que pueda haber, por el bien mayor. Tenemos que hacer un mea culpa los dirigentes sindicales y que prime lo colectivo sobre lo individual.

Yo lucho para que mi gente pueda comer un asado los fines de semana, pueda recibir atención médica cuando necesite, pueda tener su casita…hoy en Argentina un obrero tiene que tener dos trabajos para poder pagar un alquiler y es imperioso que eso cambie.

La solidaridad, con un gremio solidario

-Hay una gran reacción de las afiliadas de nuestra Internacional en la región en respaldo a este paro, una forma de retribuir con la solidaridad recibida históricamente por el movimiento obrero de este país.

-Sí, eso nos da la pauta que, aunque maltrecho, el movimiento obrero Internacional sigue vivo y en Argentina también.

Los trabajadores y trabajadoras de la industria de la carne tienen una historia riquísima de movilización y resistencia en Argentina, en Uruguay y en Brasil, y siempre nuestra Federación respaldó esas luchas.

Muchas de las conquistas que obtuvimos en el gobierno de Perón son las que nos quieren quitar ahora, y este es el momento para demostrar que el movimiento obrero argentino está vivo y que las conquistas se defienden en las calles.