Rubén Manno y Raúl Durdos disputarán la elección del sindicato marítimo, hoy intervenido tras la detención de Suárez. Quiénes son los candidatos.
Entre los marinos Rubén Manno (55) y Raúl Durdos (66) se disputará quien conducirá a partir de 2018 el Sindicato Obreros Marítimos Unidos (SOMU): hoy la intervención, a cargo de Alfredo Bertonasco, dio a conocer las dos listas que están en condiciones de competir que llevan como postulantes a secretario general a los nombrados (la tercera, que llevaba a Orlando Alfaro como cabeza de lista, y que jugaba con el fallecido Gerónimo "Momo" Venegas, quedó afuera por no cumplir con los requisitos). Votarán alrededor de 7.000 obreros marítimos.
SOMU fue conducida por Omar "Caballo" Suárez durante casi 30 años y desde febrero de 2016 hasta el 29 de diciembre quedó próximo la intervención judicial. Suárez hoy está preso. Macri se apoyó en el caso de este sindicato para hablar de las mafias sindicales y para mandar un mensaje aleccionador a dirigentes en general.
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La primera intervención del sindicato la condujo Gladys González, cargo que le sirvió para apuntalarse en su carrera política (entró al Senado junto a Esteban Bullrich ya que lo secundaba en la lista).
Tanto Manno, marplantense, como Durdos, bahiense, están vinculados al sector de la pesca, un rubro relegado dentro del gremio pese a ser el 70% de los afiliados (en el caso de Manno siempre se dedicó a la pesca, en cambio Durdos arrancó en ese rubro y continuó por la Marina Mercante). Ambos tienen como eje defender este sector y mejorar sus condiciones laborales. Pero hay acusaciones cruzadas por los vínculos que pudieran existir con el "Caballo".
A su vez a Manno lo acusan de "ser el candidato del Gobierno"; pero el marplantense se defiende y dice que "nada de eso es cierto".
Acá, una serie de preguntas que le hizo Clarín a cada uno de los postulantes.
- En caso de ganar las elecciones, ¿cuáles son las tres primeras cosas que hará en el SOMU?
RM: Lo primero es trabajar en la parte social del gremio, que la familia marítima sea el punto de encuentro para que el compañero se sienta respaldado por el sindicato. Que los jubilados estén dentro de nuestra obra social: el compañero debería quedarse con nosotros y no ir al Pami, no tengo nada contra el Pami pero nosotros debemos darle respuesta a quien trabajó con nosotros. También daré pelea por mejorar la calidad de vida arriba del buque; un mayor respeto de parte de la patronal hacia los trabajadores marítimos; algo que vengo reclamando.
RD: Los tres pilares pasan por tener un gremio federativo, tanto desde lo político como de lo económico con inclusión de todos los compañeros sin que haya persecuciones. Esto viene atado a que nadie se quede aislado y todos tengan la misma posibilidad de trabajo. Finalmente mejorar la Obra Social para brindar mejores servicios a todos los afiliados. Y una más: cambiaré el Estatuto para que un secretario general esté solo dos mandatos (de cuatro años cada uno). En mi caso, estaré solo un mandato.
- De llegar a ser secretario general puede ser que se enfrente a posibles reformas laborales, ¿cuál será su posición?
RM: Si se cumple lo que se viene leyendo de que será por sector, nosotros vamos a sentarnos a dialogar para llegar a un entendimiento. No es que vamos a ceder conquistas laborales; pero para mí la carga impositiva es clave y tiene mayor injerencia en los costos que la laboral. En el período de la intervención no hubo modificaciones al Convenio Colectivo pero hubo cosas que no se respetaron y es por eso que vamos a pedir retrotraernos a febrero de 2016 que fue cuando se inició la intervención.
RD: Es un tema a debatir y a analizar. No obstante, si prima la cordura y no hay abusos y se buscan equilibrios, nosotros sabemos que necesitamos del capital para que haya trabajo pero el capital debe saber que necesita de la mano de obra. Pero antes de hablar de una posible flexibilización tenemos que trabajar para mejorar la calidad de vida humana en las embarcaciones. No queremos más huérfanos ni viudas por desapariciones en el mar.
- Existen acusaciones cruzadas por los vínculos con Suárez, ¿usted qué dice?
RM: En todo caso yo soy el menos suarista porque entré como secretario de seccional de Mar del Plata en el año 2012 y no terminé mi mandato porque intervinieron el gremio. Los postulantes de la otra lista tienen 20 años y yo nunca formé parte del secretariado nacional.
RD: Con Suárez nunca tuve una buena relación: hemos sido en la medida en que se podía un bastión que no pudo visitar. Lo que le dije a Suárez adelante de todos en 2015 fue lo que pasó: y esto es que la Justicia se iba a encargar de él. Yo no quiero acusar a nadie, pero en la otra lista hay gente de Suárez
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