Este martes se desarrolló en Olavarría una conferencia de prensa a cargo de dirigentes de la Federación Obrera Argentina en el marco de los despidos de trabajadores de la empresa Cerro Negro aunque se hizo particular mención al caso del despido del dirigente gremial Miguel Vales.

Precisamente fue Miguel Vales quien dio inicio a la conferencia de prensa de la que participó además  José Luis Franco, tesorero de la Federación.

Al inicio de la rueda de prensa Miguel Vales agradeció la adhesión y el repudio de otros gremios de Olavarría a la decisión de Cerro Negro de avanzar en el despido de un dirigente gremial. Mencionó el respaldo de los Sindicatos de Municipales, Luz y Fuerza, Peajes, Camioneros, Sindicato Vidrio, SUTIAGA, Sindicato de Maestranza, La Fraternidad, Canillitas, Gráficos, entre otros.

El que lanzó duros conceptos fue el Tesorero de la FOCRA, José Luis Franco quien aseguró que el despedido de un dirigente sindical debe “preocupar a todos”.

Franco denunció una “convivencia” entre “SOECO con la patronal” dado que sabían que “Miguel Vales tenía tutela gremial”.

El tesorero de FOCRA sostuvo que ante un eventual despido Vales, primero, debería haber sido “desaforado” dado que “fue electo en 2017 y tiene mandato hasta 2021 como Congresal titular de la CGT en representación de la Federación.”

“Vamos a pedir la incorporación del compañero”, sostuvo Franco e indicó que harán las presentaciones correspondientes ante el Ministerio de Trabajo y no descartó avanzar en la Justicia laboral.

Franco cuestionó el convenio laboral firmado entre el SOECO y la empresa Cerro Negro. “Es un convenio basura”, dijo y habló de que hay “despidos hormigas” o “encubiertos”.

Luego encendió aún mas la crítica hacia el SOECO: “nosotros no hablamos con SOECO porque no tiene autoridad y la certificación que emite el Ministerio de Trabajo de la Nación. El SOECO no existe lo desconocemos de manera general, porque firmaron un convenio basura y no tienen reconocimiento”, dijo.

Franco explicó que con los retiros voluntarios – a los que llamó “despidos hormiga” – los trabajadores cobran sus indemnizaciones hasta en 36 cuotas.