El jefe de Gabinete, Carlos Parodi, había anticipado que la paritaria por los sueldos arrancaría con un punto menos. Efectivamente, ayer, el ofrecimiento oficial a los trabajadores de la educación de Salta, primer sector estatal en sentarse a negociar, fue un incremento anual del 17% en dos tramos: 10% a partir de febrero, a percibir los primeros días de marzo, y el 7% restante desde julio. Hasta el cierre de esta edición, la Intergremial (AMET, UDA, Sadop y UPCN), la ADP y ATE habían rechazado de plano la propuesta por considerarla “insuficiente”; solo Sitepsa no dio a conocer su postura tras la reunión. La aspiración de los distintos sectores supera el 35% de aumento salarial. Mañana los sindicatos presentarán su contrapropuesta.

Patricia Argañaraz, secretaria general de la Asociación Docente Provincial (ADP), señaló: “Estamos muy lejos de las expectativas, ellos tienen un índice de inflación del Indec que es irrisorio, cinco puntos, nosotros estamos manejando otro. El Indec tiene medidas que no coinciden con la realidad”.

La gremialista, que responde a la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera), dio marcha atrás con la decisión de no participar de las paritarias, y ayer asistió a la reunión, al igual que sus pares de AMET y UDA, que la semana pasada se manifestaron en el Centro Cívico del Grand Bourg en reclamo de la reapertura de paritarias nacionales.

Argañaraz agregó que “todo ha aumentado y sigue aumentando, y hoy el sueldo no nos alcanza. Estamos peleando en la mesa, como nunca nos pasó en la vida, con la necesidad del docente, que está bajo la línea de pobreza y le falta bastante para llegar a los 13 mil pesos”.

Desde la UDA, Guillermo Burich dijo que “no es suficiente... Si bien es la primera reunión, está muy lejos de lo que necesitamos. Si hacemos un cálculo rápido, a un maestro que recién se inicia y apenas cobra 9.160 pesos, le sumamos el 17%, en julio va a estar cobrando aproximadamente un poco más de 11 mil, siguiendo bajo la línea de pobreza”.

Por su parte, Vidal Eloy Alcalá cuestionó que la propuesta oficial incluso esté por debajo del techo del 18%. “Se habla de una inflación real de entre un 25 y 26%, y los acuerdos salariales en el sector privado van a rondar entre el 25 y 30% para recuperar la pérdida del poder adquisitivo. Ellos dicen que no hay posibilidades de mejorar porque la plata no les alcanza, pero la reducción de los fondos nacionales (230 millones de pesos) es algo que ellos han decidido aceptar”, dijo.

Oficialmente, se propuso revisar el comportamiento de las variables macroeconómicas y de cuentas provinciales en julio.