Dijo que “es tensar más de la cuerda y jugar con cuestiones que pueden terminar en hechos que nadie quiere”. Aseguró que uno espera que haya una solución pero, si no se encuentra, alguien tendrá que explicar qué va a pasar con estos trabajadores que quedan desempleados”, advirtió. Reconoció que “las expectativas son altas pero no contamos con ningún indicio como para esperar una solución”.

En torno a las expectativas de los “dragones” sobre esta última audiencia y la posibilidad de destrabar finalmente el conflicto indicó que dependerá de “la voluntad exclusiva de las empresas implicadas. Desde el 21 de junio hubo un trabajo muy desgastante. Llevamos más de dos meses y medio y no se pudo concretar ninguna propuesta”, recordó. “Confiamos en que se acabe con esta vigilia y que podamos encontrarnos con una oferta que satisfaga el interés de los trabajadores. Las expectativas son altas pero no contamos con ningún indicio como para esperar una solución”, lamentó.

“Se trabajó durante toda la semana pasada buscando soluciones con una apertura bastante grande pero luego se estancó hasta hoy. Hubo un análisis por parte de las empresas que no fue exteriorizado y esperemos que hoy rinda sus frutos”, dijo en diálogo con Actualidad 2.0.

Afirmó que la discusión continúa siendo en torno a 204 operarios, en algún sentido, aunque aclaró que “no sabemos si ése número es el correcto. No sabría decir cuál es el número porque cuando comenzamos 123 de ellos eran personal de Contreras pero después eran 137; el número exacto siempre se mantuvo en secreto”, cuestionó. “Hay 450 personas que hicieron sus exámenes pre ocupacionales que no han subido y no se sabe quiénes son sus empleadores. Hoy permanecen en su casa. Han subido 20 o 30 pero estaría parado más personal de otras contratistas que tampoco han subido a trabajar”, puntualizó el abogado.

Confirmó que habría “más de 600 personas con distintos grados de incertidumbre pero por la cabeza de los trabajadores pasa cualquier cosa”, aseguró Echelini.

Negó la posibilidad de que surja otro conflicto similar al que tuvo lugar en junio. “Se asumió la responsabilidad; la justicia penal actuó libremente. La cúpula forma parte de esta gente que no va a asumir a trabajar. Fuera de esto, uno trata de que el acuerdo se vuelva a tensar y hay responsabilidad de todos. No se puede jugar con la suerte de la gente”, manifestó.

“Llegar hasta el último día así es tensar más de la cuerda y jugar con cuestiones que pueden terminar en hechos que nadie quiere”, disparó. Aseguró que esta situación “se podría haber evitado. Uno espera que hoy haya una solución pero, si no se encuentra, alguien tendrá que explicar qué va a pasar con estos trabajadores que quedan desempleados en la ciudad”, resaltó.

Se declararon en estado alerta y movilización

Guido Dickason, vocero de la facción sindical denominada "Dragones", informó que la medida fue decidida desde el gremio ante la falta de respuestas sobre la continuidad laboral de los 204 trabajadores que la operadora Pan American Energy (PAE) entiende que estuvieron involucrados directamente en los destrozos del 21 de junio en Cerro Dragón. En horas de la mañana de este lunes realizaron una “panfleteada” en la ruta 3 y 26.

Ayer, se realizó la última audiencia entre PAE y Dragones, en el marco de la conciliación obligatoria dictada por el Gobierno. En este marco, la facción sindical pide que “los 204 trabajadores que la operadora decidió que no vuelvan a trabajar en el yacimiento, por vincularlos a los incidentes y destrozos durante la toma de Cerro Dragón, vuelvan al yacimiento".

Guido Dickason comunicó que “hicimos una volanteada en ruta 3 y 26 donde nos declaramos en estado de alerta y movilización por los dos meses de conciliación que estamos teniendo y los pocos resultados que hay, porque solamente cierta cantidad de compañeros pudieron subir a trabajar”.

Asimismo, agregó en cuanto a la causa que se inició por los destrozos en Cerro Dragón que “están lloviendo procesos a los compañeros”, manifestó en Radiocracia.

En cuanto a la posibilidad de que no se arribe a un acuerdo, el gremialista descartó repetir lo acaecido en Cerro Dragón, ya que consideró que “de “acá no sirve ir a cortar la ruta mañana”. “Es lamentable lo que estamos atravesando hoy en día, es la peor conciliación que estamos viviendo”, concluyó.