La principal queja de los manifestantes se centró en la contratación de empleados sin registrar, lo que implica que los empleadores no realizan los correspondientes pagos de aportes y contribuciones. Esta práctica deja a los trabajadores desprotegidos y sin acceso a los beneficios sociales y laborales que les corresponden.

Además, los manifestantes denunciaron malas condiciones de trabajo a las que se ven sometidos, reclamando mejoras en términos de seguridad, higiene y remuneración justa. Los comercios afectados por la protesta fueron un bazar ubicado en la calle Laprida y una tienda de artículos de limpieza y tocador que funciona dentro de una galería céntrica.

La protesta fue notable por la participación de una ruidosa batucada, en la que los manifestantes tocaban bombos y entonaban cánticos en la vereda, atrayendo la atención de los transeúntes y vecinos de la zona céntrica. Asimismo, se distribuyeron volantes en los que se demandaba la regularización de los trabajadores y se recordaba que el salario mínimo para los empleados de comercio fue establecido en 177.923 pesos.

Tras horas de protesta pacífica, representantes del Sindicato de Empleados de Comercio llegaron a un acuerdo con el Ministerio de Trabajo para garantizar la regularización de los trabajadores afectados. Este compromiso busca poner fin a la precariedad laboral y garantizar que se respeten los derechos y beneficios correspondientes a los empleados.