La Undav publicó un estudio según el cual gracias a las medidas adoptadas por el Ejecutivo nacional se logró amortiguar el impacto negativo de la emergencia sanitaria en los ingresos y, por ende, en el empleo registrado evitando así un deterioro aún mayor del entramado productivo y social, que se vio afectado de todas formas como en todas partes del mundo en el contexto pandémico.

En este marco, se remarcó el papel del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) que asistió a personas con imposibilidad de trabajar debido a la cuarentena impuesta por la emergencia sanitaria. Lo mismo con el programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP) que pagó la mitad de los salarios de las empresas más perjudicadas.

También se reconoció el lanzamiento de créditos subsidiados por el Estado nacional, para financiar empresas vulnerables tras la cuarentena. Y la decisión de mantener la doble indemnización establecida a principios del mandato de Alberto Fernández que frenó el fuerte deterioro que en el que ya venía. La «otra pandemia» de la que hablan desde el Frente de Todos.

Otra política que identificaron a favor fue la eximición del pago del Impuesto a las Ganancias a más de 1,2 millones de trabajadores, al elevar el mínimo no imponible a $175.000 mensuales a partir de octubre que entró en vigencia por vía legislativa.

Crece el empleo industrial

Desde la asunción de Alberto Fernández el empleo industrial creció en 13 de los 19 meses comprendidos entre enero del 2020 y julio del 2021. Mientras que durante el macrismo, solo registraron crecimiento en dos meses. En este julio que pasó, el registro ya había superado en más de 14 mil puestos la marca del mismo mes de 2019.

El informe concluye con una visión esperanzadora a futuro a medida que se extienda la protección brindada a través de las vacunas y se logre retomar definitivamente una vida más cercana a la vida previa a la pandemia.