En medio de un clima de extrema tensión, Panaderos debe enfrentar un nuevo capítulo en su historia, vinculada a intervenciones y dirigentes que buscan el desarme de la federación. Frutos detalló la expulsión de José Luis Sánchez, secretario general de la filial Capital Federal y brindó detalles sobre los motivos que llevaron a esta drástica decisión.

Las similitudes con el caso que enfrentó a Luis Barrionuevo y Dante Camaño aparecen en el horizonte como espejo, ante la decisión de ambos dirigentes, provenientes de Capital Federal, de acudir a la Justicia y solicitar la intervención del gremio. En el caso gastronómico, la UTHGRA, y en panaderos, la FAUPPA. La intervención judicial, y también aparece el caso Canillitas y el SOMU, son claros ejemplos de como una federación, una unión o hasta un sindicato, puede quedar devastado y hasta económicamente en ruinas tras el paso de un delegado interventor, que puesto por el Poder Judicial tiene las intenciones visibles de ordenar los papeles. Pero en la práctica, los agentes del dedo se tientan…

La disputa entre Sánchez y la FAUPPA comenzó en 2020, tras el fallecimiento del histórico dirigente Abel Frutos y en continuó en 2021, cuando pasadas las elecciones que arrojaron a Gastón al liderazgo nacional, el dirigente de la filial Capital Federal optó por recurrir a la vía judicial en su lucha contra la conducción nacional de la Federación. Según Frutos, el conflicto tuvo su punto máximo durante un proceso eleccionario en la provincia de Corrientes, donde Sánchez comenzó a mostrar posturas confrontativas, lo que derivó en un quiebre dentro de la organización.

La expulsión

Frutos explicó que la expulsión de Sánchez no fue una medida impulsiva, sino una consecuencia de una serie de acciones que, a su juicio, atentaron contra la unidad y los principios de la Federación. Entre las razones que fundamentan la expulsión, se encuentra el juicio económico iniciado por Sánchez contra la institución y la obra social de los panaderos.

“No se puede permitir que un dirigente sindical vaya atrás de la intervención de un sindicato o federación”, fustigó el también secretario de Finanzas de la CGT. La expulsión no se da por una diferencia ideológica o política, ya que Sánchez fue uno de los dirigentes que acompañó a Abel Frutos en su recorrido mientras diferentes intervenciones provocaron la debacle durante los noventa.

A pesar de la expulsión, Frutos aclaró que la filial Capital Federal no está expulsada de la Federación. La decisión afecta exclusivamente a José Luis Sánchez, quien perderá su lugar en la estructura gremial de la organización y no podrá ejercer roles en nombre de la organización nacional.