Esta decisión pone fin a un vacío legal que dejaba a las empleadas del hogar desprotegidas frente a abusos laborales, como las horas extras no remuneradas o la falta de pruebas sobre las jornadas efectivamente trabajadas.

"Este fallo marca un antes y un después para las trabajadoras del hogar, un colectivo que ha sido históricamente invisibilizado y feminizado", destacó el tribunal en su resolución, subrayando que esta medida busca garantizar la igualdad en el trabajo y evitar la discriminación indirecta por razón de género.

Hasta ahora, las empleadas del hogar no estaban incluidas en la normativa de registro horario que España adoptó tras un fallo previo del TJUE en 2019, el cual obligaba a las empresas a documentar las jornadas laborales de sus empleados. Sin embargo, dicha normativa dejaba fuera a los empleadores domésticos. "Era una excepción injustificable que perpetuaba desigualdades", señaló el tribunal, agregando que esta exclusión contradecía los principios comunitarios.

Nuevas obligaciones para los empleadores

A partir de esta sentencia, las familias y personas que empleen trabajadoras del hogar deberán garantizar un sistema de fichaje que registre el tiempo de trabajo, aunque se podrán contemplar particularidades según las características del empleo. Este cambio no solo busca mejorar las condiciones laborales, sino también proteger a las trabajadoras en casos de despidos improcedentes o reclamaciones salariales, donde la falta de pruebas era un obstáculo.

En este sentido, el fallo también establece que las autoridades nacionales deben diseñar medidas que consideren la vulnerabilidad de este colectivo y su composición mayoritariamente femenina. "La discriminación indirecta por razones de sexo no puede seguir perpetuándose en un sector clave para el cuidado y el funcionamiento de los hogares", afirmó el TJUE.

Hacia la equiparación de derechos laborales

La sentencia representa un avance significativo hacia la igualdad de derechos laborales entre las empleadas del hogar y otros sectores. El Tribunal instó al legislador español a garantizar que cualquier excepción a esta normativa esté "objetivamente justificada y no perpetúe desigualdades estructurales".

Con este fallo, las trabajadoras del hogar obtienen herramientas legales para exigir condiciones más dignas, lo que podría transformar el panorama laboral de uno de los sectores más precarizados. "Es un triunfo para todas nosotras, para nuestra dignidad y para el reconocimiento de nuestro trabajo", expresó María, trabajadora del hogar y activista por los derechos laborales, al conocer la sentencia.