Trabajadores del ámbito nacional y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) se movilizan mañana en dos puntos clave de la capital para exigir mejoras salariales, la renovación de todos los contratos y protestar contra lo que consideran el “desguace del Estado.
La convocatoria inicia a las 11:00 horas frente al Ministerio de Hacienda de CABA, ubicado en Av. Martín García 348, y continúa a las 13:00 horas frente al Ministerio de Economía de la Nación en Hipólito Yrigoyen 250.
La movilización responde a un contexto de salarios depreciados por la inflación y la falta de adecuación de los ingresos al aumento del costo de vida. A contramano de las afirmaciones del gobierno nacional sobre una supuesta recuperación salarial, un reciente informe de la Consultora Vectorial revela que los ingresos de los trabajadores, ajustados por la inflación, continúan rezagados. Según los datos, los salarios de los trabajadores estatales nacionales habrían caído un 33% al cierre del año, conforme a las estimaciones del Banco Central (BCRA), mientras que los salarios en la Ciudad de Buenos Aires estarían un 13,8% por debajo de la inflación.
En el informe, la consultora señala además que el índice de precios al consumidor (IPC) utilizado para calcular el impacto de la inflación no representa con precisión los gastos actuales de las familias, ya que sigue basado en una canasta de consumo de 2004-2005. Esta canasta, explican, “no refleja el gasto real en servicios básicos, que ha aumentado considerablemente.”
La situación de los trabajadores estatales se agrava con recientes aumentos en los costos de servicios esenciales: un 4% en el precio de las naftas, casi un 8% en servicios de salud prepagos, además de subas en las tarifas de luz (2.5%), gas (2.7%) y agua (4%), entre otros. “Estos servicios representan gastos fijos para las familias y no tienen un peso proporcional en el IPC general,” subraya el informe.
Pedro Lyon, secretario gremial, denuncia además las precarias condiciones de contratación que enfrentan los trabajadores estatales. “Estamos hartos de las paritarias de hambre, de sufrir la violencia de la renovación de contratos trimestrales,” afirma Lyon. “Miles de familias viven en incertidumbre, y el pase a disponibilidad de muchos trabajadores es una constante amenaza.”
Los manifestantes buscan visibilizar sus reclamos en un escenario en el que, según indican, se está produciendo un desmantelamiento del Estado, una economía desregulada y una pérdida de derechos.
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