La salida de Cambiemos de la gestión tras la derrota electoral no implicó que todos sus cuadros políticos abandonen el ámbito público. De hecho varios de ellos se camuflaron y aprovecharon el revoleo para seguir recibiendo un sueldo del Estado, del que suelen pedir achique en los micrófonos.

Uno de esos casos es el de Lucas Fernández Aparicio, ex Secretario de Trabajo de Mauricio Macri y actual precandidato a intendente por Juntos por el Cambio en Malvinas.

El exfuncionario, hombre de confianza de Guillermo Dietrich y pilar de lo que fuera la cartera de Producción y Trabajo macrista, nunca dejó el sector público. De hecho se recicló como gerente de Trenes Argentinos. El cargo se lo guardó como reaseguro mientras ejerció junto con Dante Sica. Previsor.

Pero eso no es todo. Es que en Trenes Argentinos también se ubicaron dos de sus socios del «sector privado». Son Federico Schaer y Joana D Venialbo. Ambos integran la Consultora Octopus con Aparicio y con Juan José Schaer.

Según pudo constatar InfoGremiales, Schaer y Venialbo están dados de alta en Trenes Argentinos Capital Humano. La empresa estatal Administradora de Recursos Humanos Ferroviarios, que está bajo la órbita del cuestionado ministro de Transporte, Mario Meoni, es quien les deposita sus salarios a fin de mes.

Con el emprendimiento Octopus, Aparicio y sus socios dicen asesorar a Organizaciones en materia de Relaciones Laborales, Derecho del Trabajo, Recursos Humanos y Procesos Productivos. En su momento circuló que fueron los consultores que acompañaron el proceso de salida de LAN del país, aunque eso nunca se terminó de comprobar.

La relación promiscua entre Aparicio, sus socios y el Estado no es nueva. De hecho, mientras era Secretario de Trabajo, Juan José Schaer fue nombrado interventor de la Cooperativa de Trabajos Portuarios del Puerto General San Martín. La firma manejaba un negocio multimillonario en uno de los puertos más importantes del país.

En simultáneo Federico Schaer también fue «asesor» de Aparicio en sus buenos tiempos. Entre 2018 y 2019 cobró con un cago en la Secretaría de Trabajo.