La Federación de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (FTIA), encabezada por Héctor Morcillo, repudió el accionar de Granja Tres Arroyos, que despidió a más de 100 trabajadores tras no lograr aplicar el Procedimiento de Crisis. Según el gremio, la empresa busca reducir personal bajo pretextos legales y, ante la negativa sindical, avanzó con cesantías, reducción de salarios y amenazas de nuevos despidos si no se aceptaban sus condiciones.

Desde la FTIA calificaron la actitud empresarial como irracional y extorsiva, dejando en claro que la respuesta será gremial.La organización recordó que siempre prioriza el diálogo y el consenso, pero ante estas maniobras patronales impulsaría medidas de acción directa, respaldadas por la legislación laboral.

El conflicto llevó al dictado de la Conciliación Obligatoria, lo que obliga a ambas partes a negociar.Sin embargo, el sindicato exige que la empresa se siente a discutircon voluntad de preservar los puestos de trabajo y no como una estrategia para dilatar decisiones ya tomadas.

La FTIA advirtió que seguirá de cerca el proceso y que, si Granja Tres Arroyos persiste en su ofensiva contra los trabajadores,el gremio responderá con acciones dentro de las plantas.La situación se enmarca en un contexto dondelas patronales buscan ajustar a costa del salario y la estabilidad laboral.