La Federación de Sindicatos Unidos Petroleros e Hidrocarburiferos (SUPEH) atraviesa momentos de tensión interna por la decisión del secretario general Juan Carlos Crespi de aplicar una reforma estatutaria que “debilitaría” a los sindicatos de base.
Crespi en el Congreso de la Federación, determinó que quien desee ser parte del secretariado nacional no deberá ser secretario general de ningún sindicato de base adherido a la federación. Se trata de la incorporación de requisitos que el ministerio de Trabajo viene observando respecto a la carrera gremial.
Los requisitos de carrera, denominados positivos o negativos, son materia de análisis en el ámbito sindical. Las iniciativas reformatorias de la Federación SUPEH vienen por impulso de un dirigente que llegó al máximo cargo por sucesión. Vale recordar que Crespi asumió en la organización nacional en noviembre de 2022 en reemplazo del histórico Antonio «Coco» Cassia, fallecido los primeros días del mismo mes.
¿Por qué hay tanto malestar?
En la ciudad de Ensenada, el Supeh que preside Nahuel Chancel, mostró su enojo debido a que no puede estar en ambos lados. Es decir, Chancel, se encuentra criticando este hecho porque debe decidir entre quedarse con la conducción del Supeh Ensenada o dejarlo todo para ir a Federación.
El ministerio de Trabajo tiene ahora la responsabilidad de aprobar o no, por medio de homologación, las modificaciones estatutarias fijadas por Crespi.
Por el momento, las tensiones de las filiales en todo el país han de mostrar su repudio y, por el momento, en la ciudad de Ensenada, los insultos y molestias se han de mostrar en cada uno de los rincones del edificio ubicado en Cabo Verde y Ortíz de Rosas.
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