El número dos de Camioneros y líder del Frente Sindical, Pablo Moyano, recibió a Emiliano Genta, secretario de Capacitación y Cultura del SUTECBA. Una relación que crece entre dos organizaciones, que serán protagonistas de la marcha en defensa de la democracia que el sindicalismo empezó a impulsar.
Por Matías Tagliani.
La pandemia de coronavirus –por obvias razones- postergó definiciones, pero en las últimas semanas el tablero del universo gremial empezó a moverse fuerte. En ese sentido, Gestión Sindical accedió en exclusiva a la foto de un encuentro de fuerte impacto en cuanto a los alineamientos de cara al futuro, y que habla de la relación cada vez más estrecha entre dos organizaciones de peso: Camioneros y municipales porteños. En la imagen se ve a Pablo Moyano junto a Emiliano Genta, el secretario de Capacitación y Cultura del SUTECBA.
Si bien la charla de los dirigentes giró mayormente entorno temas de actualidad política y a la emergencia sanitaria, este nuevo encuentro reedita la histórica relación de cercanía entre sus padres: Hugo Moyano y Amadeo Nolasco Genta, el legendario líder que comanda hace más de tres décadas el sindicato de los municipales porteños.
La alianza con el moyanismo viene creciendo hace tiempo y eso quedó en evidencia en mayo del año pasado, cuando al “partirse” la Juventud Sindical (tras finalizar el mandato del aeronavegante Juan Pablo Brey), el gremio de los municipales porteños optó por quedarse en la organización juvenil referenciada en Pablo Moyano y su Frente Sindical, y no en la del oficialismo de la central obrera.
La sintonía es muy buena y reúne a dos actores fundamentales del sindicalismo: por un lado, al gremio del transporte más importante del país, y por el otro, a la organización sindical determinante de la Ciudad de Buenos Aires, capaz de manejar el humor social en la administración porteña.
Y de ese poder de fuego conjunto, precisamente, charlaron durante la reunión y fue en directa alusión al escenario político de la pospandemia: es que sus organizaciones serán protagonistas centrales de la “Marcha en defensa de la democracia y el voto popular”, que el movimiento obrero organizado comenzó a gestar y que promete reunir a una verdadera multitud: más de 2 millones de personas a lo largo de la Avenida 9 de Julio.
Así, se intuye que nuevamente serán las organizaciones sindicales las encargadas de darle una contunde respuesta a los intentos destituyentes de la oposición política y los poderes concentrados.
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