Genta se llevó un triunfo en Cámara y Elías va a la Corte en unas elecciones de los municipales porteños enmarañadas en los pliegues judiciales

Genta se llevó un triunfo en Cámara y Elías va a la Corte en unas elecciones de los municipales porteños enmarañadas en los pliegues judiciales

En primera Instancia se validó la anulación de las elecciones ocurridas en noviembre de 2021 en las que se impuso Amadeo Genta. Eso se revirtió con un fallo de Cámara conocido este viernes. La oposición apelará ante la Corte Suprema, según confirmó a InfoGremiales, el titular de la lista Celeste, Carlos Elías.

Por Pablo Maradei.

La disputa es entre la lista Azul y Blanca, oficialista que tutela Amadeo Genta, y la lista Celeste que patrocina Carlos Elías por las elecciones celebradas el 26 de noviembre de 2021. La oposición pidió anular aquellas elecciones por no haberse respetado la libertad sindical porque la Junta Electoral no los dejó participar aludiendo falta de papeles, además de haberles objetado avales. La oposición, según consta en el historial judicial no respondió en tiempo y forma a ese reclamo y tampoco agotó la vía administrativa, sino que judicializó el tema consiguiendo el fallo a favor en primera instancia.

De hecho, en el juzgado 66 consta, que habiendo solo una lista, la oficial, los afiliados votaban varias veces para demostrar mayor cantidad de votantes: las cámaras en las que se ve ese proceder están avaladas por pericias.

Según se denuncia allí, en la Ciudad de Buenos Aires hay más de 130.000 trabajadores, de los que están sindicalizados unos 25.000; pero solo votarían alrededor de 5.000; lo que se fragua haciendo votar varias veces a las mismas personas. Con este proceder, en 2021 votaron, supuestamente, 22.000 trabajadores.

Amadeo Genta está al frente del gremio hace 40 años y su trabajo gremial ha ido en decadencia, más en esta última parte en la que, se supone, en algún momento lo relevará Alejandro Amor, un dirigente que supo cosechar recorrido propio.

Lo cierto es que un fallo de la Sala IX de la Cámara de Apelaciones revocó lo resuelto por el tribunal inferior aludiendo entre otras partes que “los poderes públicos deberán abstenerse de interferir en la vida interna de las asociaciones, es que propongo revocar el pronunciamiento apelado”.

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