La ministra de Trabajo, Raquel Kelly Olmos, anunció que también se realizará una denuncia penal por “retención indebida de haberes” al sector patronal
La ministra de Trabajo de la Nación, Raquel “Kelly” Olmos, denunció un “lockout patronal” impulsado por las empresas de colectivos y anunció que se tomarán medidas para sancionar a las compañías que no pagaron los salarios de los choferes, tras recibir las partidas de subsidios.
“Lo que hay es un lockout patronal para que se peleen trabajadores contra trabajadores”, sostuvo la funcionaria de la cartera laboral, al referirse a la huelga que resolvió la Unión Tranviarios Automotor (UTA) por la falta de pago del último aumento paritario. “Hay un sector del ámbito patronal que lo está impulsando con una motivación económica y política, saben el nivel de daño que generan”, remarcó.
Según Kelly Olmos, el sector empresario ahora está reclamando que se les transfiera “otro nivel de subsidios, porque quieren incorporar otros elementos externos al salario” a su ecuación económica. “Tienen la obligación de transferir (los subsidios) a los trabajadores porque es dinero para el pago de salarios”, puntualizó en declaraciones con el programa “De Acá en Más” por FM Urbana Play.
En ese marco, la ministra anticipó que “se multará a las empresas” que hayan incumplido con sus obligaciones y que “se va a hacer la denuncia penal por retención indebida de haberes”. “La transferencia de la última parte (de los subsidios) se hizo ayer a la tarde. Si no se depositaban hoy los salarios, objetivamente hay que hacerle esa denuncia”, dijo Olmos, aclarando que esa presentación depende del Ministerio de Transporte de la Nación.
El conflicto en el transporte de colectivos arrancó ayer a la tarde, cerca de las 16, luego de que un sector de la oposición a la conducción de la UTA, encabezada por la Lista Azul del gremio que lidera Miguel Bustinduy, resolvió adelantar la medida de fuerza que estaba prevista desde la medianoche.
“Hay líneas que han pagado correctamente y no debería haber retención de tareas”, indicó Kelly Olmos. “Lo que pasa es que en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) hay un impacto muy grande por el nivel de concentración del grupo económico DOTA, que no pagó nada”, dijo la ministra, que calificó ese paro como “muy violento” por haber sido “sin aviso previo” en un horario de retorno al trabajo.
Subtes colapsados, una alta demanda de taxis y otros servicios de movilidad por aplicaciones digitales y miles de personas buscando alternativas para poder viajar son escenas que se repiten en distintas partes de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense como consecuencia del paro de colectivos que rige desde esta madrugada.
Frente a este escenario, los peajes de los accesos a la ciudad de Buenos Aires, el estacionamiento medido en las calles del distrito y el sistema de bicicletas Ecobici del distrito serán gratuitos durante toda la jornada, según informó el gobierno de la ciudad.
La situación se complicó aún más con el sorpresivo paro del ferrocarril Sarmiento, que conecta CABA con la zona oeste del conurbano. La protesta es llevada a cabo por la Asociación del Personal de Dirección de los Ferrocarriles y Puertos Argentinos (APDFA), que reclama la homologación de un convenio colectivo de trabajo firmado en enero de 2022.
“Es una interna gremial de carácter jerárquico, que no tienen capacidad de parar el tren, y aprovechan el conflicto de los colectivos para hacer una verdadera medida extorsiva bloqueando la salida de los trenes del Sarmiento”, cuestionó la ministra de Trabajo, en una entrevista a El Destape.
Consultada por la pérdida de presentismo que sufrirían miles de asalariados, Olmos dijo que analizará el dictado de una resolución que permita mantener el cobro de ese tipo de adicionales por razones externas ajenas al trabajador, como la huelga de transporte de este viernes. “Es razonable. Me comprometo a resolverlo”, concluyó.
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