El Gobierno y los gremios docentes estarían cerca de cerrar el aumento salarial para este año. Ayer, el Poder Ejecutivo presentó una nueva oferta que implica un aumento salarial promedio del 24%. Esta alternativa surgió de reuniones que durante la jornada mantuvieron el ministro de Hacienda, Ricardo Aredes, el ministro de Educación, Daniel Gutierrez, y el nuevo interlocutor con el sector, el ministro de Gobierno, Gustavo Saadi.

Los gremios nucleados en la intersindical: ATECA, UDA, SIDCA, SUTECA y SADOP se reunieron por separado para analizar la propuesta pero hasta el cierre de esta edición insistían con una modificación y es por eso que todavía no se arribó al acuerdo definitivo.

La propuesta del Gobierno consiste en un incremento del 10% a partir de febrero; un 10% más en agosto; y el pago en septiembre de un adicional no remunerativo de $ 600 que se liquidaría bajo los mismos parámetros del Fondo Docente de Tareas frente a Alumnos. Además, se otorgaría también otro adicional de $ 1.200 por material didáctico, que se pagaría por única vez en agosto. También, se incorpora la cláusula gatillo que permitiría rediscutir el aumento si la inflación supera la mejora salarial.

La propuesta contempla pagar a fines de este mes el aumento de los meses de febrero y marzo por planilla complementaria. En junio, se cobraría el 10% de mayo.

De esta manera, el cargo testigo de un maestro que se inicia en la docencia pasaría de $ 8.500 a $ 9.672, conforme a las proyecciones que elaboró el Gobierno.

La intersindical parecía dispuesta a aceptar la oferta. Sin embargo, plantearon que la segunda parte del aumento debería pagarse en julio porque históricamente los acuerdos salariales se realizan por semestre.

Tras la "modificación" que propone la intersindical, los ministros del Poder Ejecutivo analizaban si era posible adelantar el pago de la segunda cuota del incremento, teniendo en cuenta que julio es un mes complicado para las finanzas de la administración pública provincial.

Hasta el cierre de esta edición no llegaba la respuesta del Ejecutivo. Mientras tanto, los representantes de los docentes esperaban el llamado del Gobierno en un bar céntrico. Los dirigentes gremiales evaluaron la propuesta como "informal" y aseguraban que no pretendían generar falsas expectativas. Sin embargo, a última hora comenzó a circular por las redes sociales para la consulta de las bases.