Crece la tensión entre el Estado provincial y los distintos gremios que nuclean a los trabajadores de la provincia. Las negociaciones salariales se llevan por separado y los funcionarios a cargo de las mismas aseguran que hay consenso para hacerlo así y apuntan contra una supuesta crisis de representatividad.
El malestar de los gremios crece a medida que avanzan las negociaciones paritarias. Los referentes de los principales sindicatos aseguran que el gobierno busca generar internas. Desde la cartera de trabajo niegan esa posibilidad.
“Divide y reinarás”, una vieja expresión que en el último tiempo se repite mucho entre los referentes de los gremios a la hora de referirse a la forma en que el gobierno maneja las negociaciones salariales.
La cartera de Trabajo los convoca por separado y los gremios aseguran que es una estrategia para romper la unidad de los mismos, algo que se evidencia en las ausencias de algunos sectores en las marchas pese a que dejaron claro su disconformidad respecto de los aumentos otorgados.
Gremios piden reuniones unificadas pero, después, también técnicas para tratar las particularidades de cada sector.
Consultado al respecto, el titular de la cartera de Trabajo, Normando Álvarez García, optó por restarle importancia al asunto y atribuirle esa crítica puntual solo a un par de sindicalistas:
“Los gremios no, la representante del Tribunal de Cuentas y el de APUAP. El resto de los gremios está de acuerdo.
“En conjunto, el 90 % de ellos no puede contar sus necesidades. Cada sector tiene sus propias realidades”, agregó.
En ese sentido, planteó: “Son estrategias de algunos dirigentes de ir todos para demostrar que tienen representatividad”.
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