El Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y de Cabotaje Marítimo salió al cruce del Gobierno Nacional por la falta de autoridades clave en la Subsecretaría de Recursos Acuáticos y Pesca. La reciente salida de Alejandro Bonicatto, hoy ex director nacional de Coordinación y Fiscalización Pesquera, dejó vacante un puesto estratégico para el control de la actividad pesquera en el país.

El gremio adherido a la Fempinra denunció la derogación de normativas esenciales, lo que agrava la situación de anomia en el sector. El secretario general del Centro, Mariano Moreno, advirtió que esta acefalía afecta gravemente a la industria pesquera, destacando que “el control de la pesca es fundamental para evitar la pesca ilegal y la sobreexplotación de los recursos”. Según Moreno, la falta de regulación no solo pone en riesgo los recursos actuales, sino también las generaciones futuras.

El gremio criticó el “desmantelamiento” de los mecanismos de fiscalización, como la supervisión de inspectores y el monitoreo satelital de los buques, esenciales para garantizar la sostenibilidad.Moreno advirtió que es representa un alto riesgo para el caladero y la posible pérdida de certificaciones internacionales. “El Gobierno decidió avanzar sobre el desmantelamiento de los mecanismos de Control y Fiscalización pesquera, dejando los muelles desiertos”, señaló ante lo que puede significar una depredación sin precedentes y un negociado entre el Gobierno y entidades internacionales.

“Este estado de acefalía y anomia perjudica gravemente a todos los actores del sector. Sin controles estrictos, los daños pueden ser irreparables a largo plazo”, cerró Moreno en declaraciones a los medios de comunicación.