Sindicalistas estatales salteños lanzaron ayer fuertes críticas a los cambios en la paritaria que estableció el Gobierno nacional a través decretos de necesidad de urgencia. Patricia Argañaraz (ADP), Eloy Alcalá (AMET) y Guillermo Burich (UDA) rechazaron que a nivel nacional no se fije un piso salarial.

El presidente Mauricio Macri, además, igualó la representación de los sindicatos del sector en la mesa de negociación, en lugar de la representación proporcional que regía hasta ahora. CTERA, el gremio que más afiliados nuclea a nivel nacional, salió al cruce y adelantó que denunciará al Gobierno ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Con un decreto, Macri decidió cambiar las reglas de las paritarias que habían sido instauradas con la ley 26.075 de financiamiento educativo, en 2007.

También estableció que el piso de los salarios deben estar arriba del 20 por ciento del salario, mínimo, vital y móvil, que desde enero se ubica en 9.500 pesos.

En cada provincia se deberá discutir los salarios con ese lineamiento.

ADP, gremio de base de CTERA, envió un comunicado con duras críticas a las medidas. La secretaria general en Salta, Patricia Argañaraz, dijo que "hay un retroceso" y que están en estado de alerta. La dirigente gremial sostuvo que se crearán disparidades en las provincias sin un monto de dinero específico que fije el Gobierno nacional como piso salarial.

En una lectura política, Argañaraz expresó: "Vienen por los docentes y los sindicatos. No nos harán callar". Y cuestionó que se haya recurrido a DNU para cambiar leyes.

Desde AMET, Eloy Alcalá dijo que analizarán el decreto para hacer las presentaciones correspondientes. El gremialista anticipó que rechazarán un incremento salarial del 15%, que es lo que se proyecta como inflación oficial para el 2018.

El jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, pidió esta semana compromiso en las negociaciones para bajar la inflación. En Salta, por cierto, desde el próximo mes se dará a conocer el índice mensual del costo de vida.

Guillermo Burich (UDA) también apuntó contra los cambios. "Estamos en total desacuerdo, se perjudica a los docentes", señaló.

"El Ministerio de Educación nacional no se puede desligar de la responsabilidad de hablar de salarios porque el piso fijado históricamente en esta negociación es el que toman de referencia el resto de las provincias para sus discusiones", expresa el texto que compartió la UDA.

Cruce a nivel nacional

Ayer, el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, aseguró que el decreto oficial que modificó las pautas negociadoras nacionales entre los gremios docentes y el Gobierno no fue hecho contra nadie sino que ordena y pone blanco sobre negro. Dijo que existía confusión en relación con una paritaria nacional, lo que fue rechazado por dos de las cinco organizaciones con representación en todo el país. 

La Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA) difundió un documento firmado por la secretaria general, Sonia Alesso, y el adjunto, Roberto Baradel. 

El texto señala que el decreto es “un nuevo ataque a las organizaciones sindicales docentes”. Y argumenta: “El Gobierno avanza con el desmantelamiento de la instancia de negociaciones colectivas a nivel nacional, modificando de manera unilateral los acuerdos que se habían establecido”.