Una comitiva de la Federación Judicial Argentina (FJA) mantuvo este jueves una reunión en el Congreso de la Nación con diputados integrantes del bloque Innovación Federal, donde le trasmitieron “el desacuerdo con la Ley Ómnibus y las principales inquietudes contenidas en ella”, no sólo en su capítulo laboral sino en cuanto “al marco social, jurídico y político que afecta al Poder Judicial, a la clase trabajadora y al resto de la sociedad”.

La delegación de la entidad estuvo encabezada por el secretario de Hacienda de la FJA Jorge Sotelo, el secretario general de la Asociación de Empleados y Funcionarios del Poder Judicial de la Nación (AEyFPJN), Gonzalo Salumy el director de Organización de la FJA, Sebastián Cerdán. La visita de los dirigentes e da en el marco de una serie de reuniones que se vienen dando entre diversos sectores y bloques políticos en el marco de la discusión de la Ley Ómnibus y su tratamiento en comisiones.

La delegación fue recibida por la presidenta del Bloque Innovación Federal Pamela Calletti y los diputados nacionales Carlos Fernández, Alberto Arrua, Daniel Vancsik y Yamila Ruiz de Misiones, Yolanda Vega de Salta y Agustín Domingo de Río Negro. En la reunión también estuvieron presentes Gustavo Palmieri del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y Gabriela Stefani, Kevin Nielsen y Josefina Ignacio de la Asociación de Pensamiento Penal (APP).

Contra la ley

“El debate tiene que ser serio y profundo. Porque ésta ley destruye una gran cantidad de cuestiones fundamentales y estratégicas del Estado y la vida en comunidad que después se tardan años en volver a reconstruir. Hay que rechazar la Ley Ómnibus y el mega DNU de plano”, puntualizó Sotelo.

“No es un rechazo infundado el que hacemos, sino que se sostiene en la defensa de nuestras condiciones de vida como trabajadores. No buscan modificar un artículo, sino el conjunto de derechos que son el piso mínimo de estabilidad y de dignidad que un trabajador puede tener. No lo vamos a permitir”, continuó Cerdán.

Discutir el Poder Judicial

“El rechazo del DNU es total desde el contenido y desde la forma. La mayoría de las modificaciones no revisten un carácter de urgencia, y temas de una profundidad estructural son tratados en pocos días sin un debate real que incluya al conjunto de la sociedad”, comenzó diciendo Salum. “En particular, nosotros como trabajadores del Poder Judicial notamos que hay temas tratados con una fragilidad y un desconocimiento que nos sorprende, tal es el caso del traspaso de la Justicia Nacional, la cual fue incluida en la Ley Ómnibus, pero sin dar ningún tipo de marco teórico, ninguna justificación y casi nula información de cómo se instrumentaría” remarcó.

“Desde la FJA no estamos en contra de discutir el Estado actual y cómo funciona el Poder Judicial, pero decimos que esa discusión es estéril si no tiene en cuenta la voz de quienes día a día trabajamos en las oficinas. Por eso es fundamental nuestro reclamo de contar con un ámbito de Negociación Colectiva Nacional, por ejemplo. Nadie mejor que nosotros conoce las dificultades que se atraviesan y un eslabón fundamental para dar mejores”, finalizó Cerdán.