Con el Movimiento Sindical Peronista, la CGT se involucró en las negociaciones del oficialismo. Una reunión clave con Barrionuevo activó demandas gremiales.
Por: Alejandro Di Biasi.
La carrera presidencial ya está en marcha y son varios los que ya se anotaron en la competición, algunos respaldados en los buenos porcentajes que proporcionan las encuestas y otros con el objetivo de convertirse en sumar puntos que les permitan sentase en la mesa de negociaciones. Uno de los espacios más importantes no se quiere quedar afuera de la competencia y viene avisando que no se conformará con un rol menor. Se trata de la Confederación General del Trabajo (CGT) que el 17 de octubre pasado lanzó el Movimiento Nacional Sindical Peronista con el propósito de colocar dirigentes en las listas de diputados, senadores, concejales y hasta aportar alguno funcionario en un futuro gabinete.
Después del impasse del verano y otras vicisitudes (negociaciones paritarias y reclamos por fondos de obras sociales), los principales dirigentes cegetistas comenzaron a moverse para dar señales concretas a la compleja conducción del Frente de Todos y del Partido Justicialista.
De hecho, dos de los secretarios Generales de la central obrera, Héctor Daer y Pablo Moyano, participaron del encuentro donde confluyeron distintos referentes de la alianza gobernante. Del gremialismo también fueron de la partida Abel Furlán (metalúrgicos, UOM), Sergio Palazzo (bancarios y de la Confederación Federal de Trabajadores) y Hugo Yasky (CTA de los Trabajadores). Los tres están alineados en el kirchnerismo y si bien la UOM y La Bancaria forman parte del consejo directivo de la CGT no integran el Movimiento Nacional Sindical Peronista, que viene a suplantar a las 62 Organizaciones Peronistas.
Por la división de las 62, intervino Barrionuevo
Como ya es público, las divisiones en el sindicalismo son moneda corriente y las 62 Organizaciones no escapan a esta situación. Hoy está partida en tres: La oficial estuvo en los últimos años en manos de Gerónimo "Momo" Venegas, titular de los peones rurales (UATRE) y hoy presidida por el taxista José Ibarra. Otra está referenciada en el moyanismo, encabezada por el dirigente de los repartidores (aplicaciones) Marcelo Pariente y la tercera la encabeza Hugo Benítez (Asociación Obrera Textil) y responde a la propia CGT.
Hace pocas semanas el líder de los Camioneros, Hugo Moyano y su hijo Facundo (Adjunto del gremio de Peajes) participaron de un prolongado encuentro con las 62 de Ibarra, con la intención de "juntar voluntades" e ir por la unidad. Pero como los tiempos electorales parecen acelerarse, intervino Luis Barrionuevo y aprovechó sus tradicionales asados marplatenses en el Hotel Perón del gremio de los Gastronómicos (UTHGRA), para reactivar las demandas gremiales.
El almuerzo-conclave reunió a los Gordos, Independientes y Barrionuevistas quienes difundieron un documento donde destacaron: "La política no nos va a resolver los problemas. La dirigencia sindical se tiene que meter adentro de la política para lograr desde ahí encontrar las soluciones de los compañeros. Por eso no hay que equivocarse". Y dejaron en claro: "El movimiento obrero es la columna vertebral del peronismo y debemos tener participación activa en las próximas elecciones".
Barrionuevo convocó a los gremios a un hotel de Mar del Plata, de cara a las elecciones.
Los gremios aclararon que no quieren romper con el Frente de Todos
Más de 100 dirigentes, en representación de unas 60 organizaciones gremiales, compartieron el encuentro, en el que por supuesto no quedó afuera la situación laboral, pero apuntaron a "constituir el músculo (político) necesario porque tenemos responsabilidad sobre los que representamos… debemos poner el peronismo en marcha, y eso va de la mano de quienes somos parte de la dirigencia sindical organizada".
Por las dudas, aseguraron que la central obrera no piensa romper con la alianza gobernante. En este sentido, indicaron: "Debemos, dentro del Frente de Todos, discutir los matices y por eso desde la CGT representamos a los trabajadores y trabajadoras" y agregaron que "se discute el futuro político del país y los futuros compañeros y compañeras que van a ir a cada lugar, que puedan acceder para debatir la calidad en un municipio, en una provincia y el destino de nuestro país".
Plantearon la necesidad de "militar y construir el poder de los sindicatos, poder sindical y poder político" para analizar la postura de la oposición. Al respecto, señalaron que "los liberales nos dicen que hay que devaluar y subir precios, dejando para el final los ingresos; vemos que no es ese el camino. Cada vez que eso pasa, quedan menos persona arriba de la línea de sustentación".
En un mensaje que sonó a autocrítica (por no repetir errores durante la gestión de Mauricio Macri), manifestaron que "los liberales están golpeando la puerta para poder volver a ser gobierno, y ahí están en juego todos los intereses que representamos nosotros. No nos podemos confundir, no podemos ir en contra de los intereses propios". E insistieron en la necesidad de "militar en cada rincón, organizarnos, ir a buscar a todos los compañeros y compañeras para fortalecernos en esa discusión de debate a futuro".
Representantes propios: el objetivo de los sindicalistas
De la citada reunión de Hugo Moyano con representantes de las 62 Organizaciones, quedó una frase del Camionero: "Tenemos que volver al histórico 33 por ciento que tenía el sindicalismo en la lista de diputados. Hoy no tenemos ningún peronista". Moyano, Palazzo, Yasky y Vansesa Siley (judiciales) son peronistas. Casi por la misma línea fue Barrionuevo, quien afirmó: "Queremos elegir nuestros representantes y quien tenga la lapicera le va a tener que dar la participación al movimiento porque vamos a trabajar en todo el país y vamos a gritar que el peronismo está vivo".
Manifestó que "o tenemos que ser más furgón de cola", y adelantó: "Haremos un estadio para mostrar nuestro poder de movilización". Para demostrar que están abiertos al diálogo, dijo el proyecto sindical para las próximas elecciones "no tiene nada de cerrado" y que "todos pueden acercarse". Y deslizó: "Nos van a tener que dar la participación porque vamos a trabajar en todo el país, hay que ponernos las pilas y mostrar que el peronismo está vivo. Tenemos todas las herramientas, dejemos el ostracismo. Lo tenemos que hacer si queremos que nos respeten".
La CGT fundó un partido propio y no quiere quedarse sin representación en el oficialismo.
Si bien no se habló concretamente de candidatos, se analizaron las distintas figuras que pueden competir por el Frente de Todos, entre ellos el presidente Alberto Fernández; el ministro de Economía, Sergio Massa; el embajador en Brasil, Daniel Scioli y el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, con quien Barrionuevo construcción un fuerte vínculo en el último año, aproximadamente. Si bien la dirigencia tiene puesta su preferencia en Massa, no habrá un documento de CGT hasta que se defina justamente cuál será la participación gremial en los comicios.
Participaron del encuentro el también cotitular de la CGT Carlos Acuña, José Luis Lingeri (Obras sanitarias), Gerardo Martínez (construcción, UOCRA), Amadeo Genta (municipales porteños SUTECBA), Sebastián Maturano (Juventud Sindical CGT), Laura Sasprizza (UTHGRA), Oscar Rojas (Maestranza), Omar Maturano (La Fraternidad), Roberto Solari (Guardavidas), Marcelo Orlando (UTEDYC), Roberto Coria (Guincheros), Daniel Vila (Carga y Descarga), Rubén Sandoval (Perfumistas), Andrés Rodríguez (estatales, UPCN), Belén Rato (Espectáculos Públicos), Roberto Fernández (UTA), Armando Cavalieri (Comercio), Benítez (Textiles), Maia Volcovinsky (Judiciales) y Miguel Paniagua (Espectáculos Públicos), entre otros
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