El líder del Sindicato de Obras Sanitarias fue uno de los expositores durante el «Encuentro Nacional con el Agua» que se realizó en Parque Norte.
Durante el «Encuentro Nacional con el Agua» que se realizó en el centro de convenciones de Parque Norte, el secretario general del Sindicato Gran Buenos Aires de Trabajadores de Obras Sanitarias (SGBATOS), José Luis Lingeri, reclamó por la tarifa social del agua.
Pero durante su exposición, remarcó que «los que tienen poder de pago deben afrontar el costo real de ese servicio». Y agregó: «Este recurso lo deben pagar aquellos que consumen por cantidad y deben pagar la tarifa que corresponda».
Profundizando sobre su postura, el histórico dirigente de la CGT señaló que «los temas pendulares de la política se tienen que terminar. El agua no es gratis, y con la escasez de agua que hay en el mundo, este recurso lo deben pagar aquellos que consumen por cantidad».
También aclaró que desde su sindicato «defendemos los subsidios, pero hay que lograr un equilibrio macroeconómico que permita a la empresa ser sustentable».
Lingeri y la sustentabilidad de Aysa
Y redondeó: «No vamos a ir contra los que no pueden pagarla, pero quienes consumen y tienen poder adquisitivo deben pagar el servicio, porque la sustentabilidad de la empresa (AySA) está también dentro de la tarifa».
Asimismo advirtió que «el Estado tiene que estar presente en este servicio vital como es el agua potable y el saneamiento». Y analizó que es importante «que acá estén representadas las provincias, las cooperativas y las empresas privadas que han estado operando a lo largo del país, porque va a enriquecer el diálogo. Y lógicamente el gremio está apoyando y estamos atrás de ese tema».
«Defendemos los subsidios, pero hay que lograr un equilibrio que permita a la empresa ser sustentable», dijo Lingeri.
Por otra parte, expresó que el país «está en un momento difícil. Cada uno tiene que renunciar un poquito a sus reclamos porque necesitamos que el país salga adelante».
En el foro de apertura estuvieron, además de Lingeri, la presidente de AySA, Malena Galmarini; el ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis; el ministro del Interior, Eduardo Wado de Pedro; el administrador del ENOHSA, Nestor Álvarez; y el Secretario General de la FeNTOS, Carlos Adamo.
Más adelante, quien tomó la palabra en representación del Sindicato de Obras Sanitarias y en el panel «Futuro del empleo y transformacion digital», fue la directora del Instituto Tecnológico Leopoldo Marechal (ITLM), Gabriela Sacco, quien remarcó que el acceso a la educación técnica en agua y saneamiento, y la comprensión de las problemáticas de lo que se trabaja, es clave.
«Nosotros asociamos la reconversion laboral a la necesidad de pensar el futuro de nuestros trabajadores del sector y de nuestros trabajadores de la empresa en un esquema en que la reconversion se asocie a la innovación y al futuro», planteó.
Cómo se modifican los subsidios del agua
Mientras que en el panel «Ordenamiento y políticas del Agua», Ariel Monzón, también en representación del SGBATOS, planteó que la inversión en materia de expansión para el acceso del derecho al agua y el saneamiento «no puede estar sujeta a los contextos económicos y requiere un plan estratégico que asegure su sostenibilidad».
Y agregó: «Hay que armar un plan estratégico que tiene que bajar de la política federal, como bien dijo Lingeri. Una ley federal que asegure el acceso universal al derecho al agua y saneamiento para todos los argentinos y argentinas por igual».
Hay que recordar que desde el próximo mes quienes residan en las zonas de ingresos altos dejarán de recibir subsidios y comenzarán a pagar la tarifa plena (alrededor de un 15% de los usuarios).
Aquellos ubicados en zonas de ingresos medios, en tanto, tendrán una quita gradual, ya que el subsidio se reduce a 40% en noviembre, 20% en enero y tarifa plena a partir de marzo de 2023.
Quienes estén radicados en zonas de ingresos bajos tendrán subsidios del 45% a partir de noviembre, 30% a partir de enero y 15% en marzo. Este último porcentaje lo mantendrán durante un año. Mientras que, finalmente, los hogares que perciben la tarifa social van a seguir manteniendo el subsidio, sin necesidad de inscribirse en el registro.
Comentá la nota