Por: Jorge Duarte.

Luego de una semana frenética, que dejó como saldo un mensaje del Presidente, "no es momento de bloqueos", la pelea mediática entre Héctor Daer y Pablo Moyano y centenares de notas cubriendo el asunto, Daniel Vila, el titular del sindicato de Carga y Descarga, habló con InfoGremiales sobre el conflicto que enfrentó a Mercado Libre con Camioneros por la representación de los trabajadores de la firma, hoy encuadrados en su sindicato.

"Estamos conformes con la resolución del conflicto porque lo que sucedió ayer fue fortalecer al movimiento obrero. Héctor Daer dejó claro cómo se maneja un conflicto cuando se cruzan dos actividades y cuales son las instancias a las que tenés que recurrir", abrió Vila.

Además contó que, tras los bloqueos de los depósitos, recibió el respaldo de la totalidad de la central obrera: "A mi me ha llamado todo el Consejo Directivo de la CGT para solidarizarse. Hasta se hizo una reunión de mesa chica para tratar este conflicto".

Vila, platense de 56 años, es un dirigente de "perfil bajo", como él mismo se define, que comanda la Unión de Trabajadores de Carga y Descarga de la Argentina desde 2012. Desde entonces su organización creció de 2 mil a 9 mil afiliados.

"Acá hay casi 1200 trabajadores con perspectiva de que puede haber 3500. Es toda una perspectiva de trabajo para la juventud terrible", explicó respecto del potencial del depósito del Mercado Central. Allí trabajan empleados de entre 18 y 23 años y cobran salarios que con el último aumento llegarán a los 75 mil pesos brutos. "Ayer me llamó Daer, le conté y se quedó asombrado", aseguró.

La principal crítica a la representación de su gremio en Mercado Libre apunta a cláusulas de flexibilización laboral en su convenio colectivo de trabajo. Pero Vila lo niega. "No hay banco de horas. Cuando nosotros firmamos con Mercado Libre acordamos un entendimiento para permitir que se instale. Acá tenemos delegados y se pagan las horas extras. Hoy se cumple la Ley de Contrato de Trabajo y el convenio colectivo de Carga y Descarga".

"Laburan 9 horas por día, tienen una hora para comer y dos paradas de 15 minutos. Los chicos tienen los descansos que marcan la ley. Son turnos y se respetan. El sistema del depósito está adecuado a eso. Sino hoy con las redes sociales cualquier chico saldría a denunciarlo", remarcó.

A pesar de no ser una cara pública de la CGT, Vila supo integrar las filas de la extinta CGT Azul y Blanca y desde ahí llegó un órgano clave en la central obrera. Es parte del comité arbitral, mecanismo pensado, justamente, para dirimir las disputas de encuadre entre los gremios confederados. "Yo soy miembro del comité arbitral de la CGT. Ellos no presentaron el caso ahí y eso que Moyano tiene dos o tres miembros. Pero nuestro agrupe es claro", repasó.

"Yo apunto a que esto fortalezca el movimiento obrero y que entendamos que hoy estamos en una situación catastrófica, peor que 2001. Nosotros tenemos que pensar que tenemos un rol fundamental y necesitamos trabajar en conjunto con los empresarios. Si ellos ganan mucha plata, nosotros tenemos que tener la cintura para que nuestros trabajadores tengan todos los beneficios", concluyó.