Serios incidentes se produjeron frente a la Legislatura provincial cuando llegó la columna de manifestantes de ATE que a primera hora de la mañana habían cortado los puentes que unen esta capital y Patagones.

Con mucha facilidad pudieron superar el vallado ubicado en Saavedra y San Martín y se produjo una batalla campal, cuerpo a cuerpo, entre medio centenar de trabajadores y los policías que custodiaban la sede del parlamento provincial. Piedras, cubiertas y palos que se habían acopiado para una fogata, fueron elementos que estuvieron al alcance de la mano.

La situación se normalizó con la intervención del grupo especial COER que utilizó gases y balas de gomas para disuadir a los manifestantes que se replegaron hasta la esquina de San Martín y Colón.

Producto de los enfrentamientos hubo unos 9 policías heridos, con cortes en cara y brazos por piedrazos recibidos. El comisario Antonio Jesús Mandagaray fue uno de los más lesionados, con un corte importante en su frente que obligó a que fuera vendado por personal del Hospital Artémides Zatti.

Intervino el fiscal Juan Pedro Puntel quien requirió datos a las autoridades policiales.

En el recinto, mientras se trataba el Plan Castello, el presidente Pedro Pesatti relató los incidentes, mencionó que hubo heridos y refutó los dichos del legislador Mario Sabbatella quien había expresado sus críticas a la represión policial. Por su parte, Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE, dijo que hubo diez manifestantes heridos en la guardia del Hospital, entre ellos él y el adjunto Aldo Capretti, afectados por los gases lacrimógenos. “La policía reprimió como hace años no se veía en esta provincia”, indicó.

La protesta de estatales y desocupados se debió al rechazo al endeudamiento que se debate en el Parlamento.