Por: Luis Autalán / Fotografía: Ariel Gaspardi.

Apuntes breves entonces: Corte Suprema, peronismo, kirchnerismo, Cristina candidata, grupos concentrados, Pablo Moyano. Fuerte autocrítica al Frente de Todos e igual de potente para la CGT, la derecha, la renta empresaria y una tan simple como contundente sobre la deuda interna: «Con el compañero que abre la heladera y ve que está vacía».

Nacido en la localidad bonaerense de Longchamps hace 61 años. Se define peronista, una condición que realza incluyendo -sin lugar a discusiones internas- al kirchnerismo como parte vital, el número 2 del Smata (secretario Adjunto), referente del Frente Sindical (Fresimona) e integrante de la CGT ofrecerá algunas sonrisas para amenizar algunos tópicos de una extensa conversación en su oficina gremial del edificio ubicado sobre la Avenida Belgrano. En el ida y vuelta a potencia de Montaña Rusa, habrá pocos respiros, se advierte al público lector. Apuntes al fin entonces para comenzar la presentación de esta entrevista de InfoGremiales.

«Paco», un apodo que remite a Francisco Manrique un dirigente que en los 60 supo ser columnista de los informativos de Canal 13, como también ministro de Bienestar Social, uno de los forjadores del PRODE, el PAMI y otras medidas. Y para el sindicalista anfitrión de Smata su ingreso a la actividad mecánica fue en Volkswagen durante 1985 cuando existía el Partido Federal, conducido -justamente- por «Paco» Manrique. «En aquel momento compañeros me bautizaron Paco, y te digo que si hoy alguien me llama por mi nombre, Mario, capaz que ni me doy vuelta».

Resultó electo delegado 6 años después en 1991, cuando la fusión de Ford y Volkswagen generó a Autolatina. Ya en 1995 comenzó a desempeñarse en Smata como capacitador, una tradición histórica para esta organización gremial respecto a sus delegados. Logró una de las mejores 4 calificaciones en esa responsabilidad y los otros tres compañeros por diferentes circunstancias como distancias geográficas y otras no pudieron ocupar ese rol en la sede central de los mecánicos. En el 2000 Manrique ingresa al consejo directivo de Smata en su vocalía. Para 2004 alcanzó la secretaría de Organización, fue en 2008 cuando un referente de los mecánicos José Rodríguez lo convoca para ser su secretario Adjunto. Un año después fallecía Rodríguez y Manrique ocupa la secretaría general. Luego, un problema de salud, según comenta, hizo que tomara conciencia que no podría desempeñar esa responsabilidad y surge una charla con Ricardo Pignanelli, el actual líder de los mecánicos para trabajar codo a codo: «Fue cuando le dije que él tenía que tomar la posta, sin estar a pleno no se puede conducir una estructura como la de Smata», así recuerda aquella charla.

Parte de la historia que se matiza con breves referencia a sus cables a tierra, la música con amplio criterio de gustos y modalidades, el ir a comer asado con amigos «pero llevando algo cada uno, porque las cosas no están para que muchos puedan hacerse cargo de invitar». Hincha de Boca y admirador del Juan Riquelme jugador, ya que aflora su espíritu gremial para considerar que el hoy vicepresidente Xeneize, «hace las cosas que a él le molestaba que le hicieran los  dirigentes como jugador». Y un último trazo apreciable para remitirse al rock nacional, desde Sui Géneris a Pappo, «en aquellos tiempos donde las letras decían muchas cosas y te hacían pensar, te daban ideas de la realidad». Tómélo o déjelo sería la advertencia gentil al inicial la lectura, que dentro de un gremio automotriz también infiere la cortesía para que se ajusten los cinturones de seguridad. La travesía no tendrá expresiones en los viejos «casetes», y el comienzo a horas del Consejo del Salario para fijar el nuevo Salario Mínimo Vital y Móvil, un tema que preocupa y enoja a Mario «Paco» Manrique a punto de que no definió su asistencia al mismo, parte por la discusión colectiva:

«Si vos no tenés control respecto a las medidas que tomás, es como si no las hubieras tomado. Y queda claro que nosotros estamos pagando costos políticos por eso»

Mario «Paco» Manrique

-¿Mito o realidad, una de las mejores recetas para negociar paritarias la tiene el Smata. Bajo perfil en la discusión de acuerdos y algún secreto bien guardado de táctica?

-No es una cuestión de secretos, para nada. Hemos implementado un sistema de paritarias desde 2011 y nos dio buenos resultados, para aquellos momentos las terminales nos pedían que tengamos ‘previsibilidad’. Ellos a sus casas matrices les informaban que el costo laboral para el año siguiente iba a ser del 60% y nosotros reclamábamos el 70% o el 80%. Te lo dije en los números de hoy, para la época donde comenzamos con este esquema en 2011 las automotrices planteaban el 20% y nosotros reclamábamos el 40%. De ahí que tuvimos conflictos importantes, llegamos a tener que cortar la Panamericana durante 5 horas y a tomar fábricas para llevarle un salario aceptable a nuestros compañeros. Pero las empresas insistían en que no éramos ‘previsibles’. Entonces con reuniones, discusiones y planteos llegamos al acuerdo: discutir la mejora de salarios cada 3 meses. Nosotros tomamos a 3 consultoras que medían la inflación para tener el valor indicado, un sistema que fuimos explicando mediante asambleas en cada fábrica, porque esto lo tenía que aprobar la gente. Cuando ellos lo hicieron arrancamos a negociar, promediamos los índices y sale la mejora cada 3 meses. Antes, con los acuerdos anuales al principio estábamos bien, pero cuando llegabas al final tenías un atraso de 7 meses respecto a la inflación. Hoy al aumento de precios lo corremos 2 meses atrás.

-¿Cuántas ramas de actividad tiene el Smata?

-Tenés las terminales, las autopartes, los concesionarios, talleres, las VTV, el Automóvil Club,  entre otras. Convenios nacionales tenemos 4 y luego hay más de 60 porque cada empresa tiene su convenio, los cuales están adaptados al sistema laboral de cada empresa.

-¿Y la cantidad de trabajadores y trabajadoras que tutela esta organización?

-En esta industria hoy tenemos 115.000 laburantes, hay algunos que los representamos con la UOM, y también otras organizaciones afines al sector como vidrio, químicos, etc, todas actividades que hacen a la fabricación de automóviles y otros vehículos.

-¿Y el registro histórico digamos más o menos reciente sobre de puestos de trabajo?

-Cuando asumió Néstor Kirchner la presidencia, en 2003 teníamos 25.000 trabajadores. Con el final de la crisis de los 90 habíamos perdido muchos puestos de trabajo. De estar en 75.000 para aquella época habíamos caído a 25.000. Las empresas cerraban, se iban a Brasil etc. La supervivencia era mantener las luces prendidas de las fábricas esperando, y rogando, que llegara la reactivación. Gracias a Dios para nosotros con Néstor en la presidencia se generó un arranque en 2004/2005 y para 2015 terminamos con 94.000 laburantes. Lo cual te dice que luego de los gobiernos de Néstor y Cristina sumamos 69.000 trabajadores. Por eso a veces se discuten cosas y la memoria le falla a un montón de gente. Porque vino Macri con la apertura y la reconversión, bueno fue un gobierno donde nosotros perdimos entre 10.000 y 15.000 trabajadores. Cuando volvimos a ganar en 2019 y más allá de la pandemia recuperamos esa cantidad de laburantes y sumamos 10.000 más.

-También destacan a Smata por su predisposición para actualizar convenios.

-Se puede decir que nosotros tenemos convenios de avanzada. Los cuales se van modificando a medida que va cambiando la actividad. La tecnología de hoy en la industria automotriz produjo muchos cambios. Nuestra preocupación siempre es que esas modificaciones sean para mejorar la calidad de vida de nuestra gente, no a generar su expulsión. Porque por la vía la tecnología a veces con la misma cantidad de gente podés producir más. Pero más allá de esos avances también hubo necesidad de mucha mano de obra. Por ejemplo en Toyota, con 140.000 unidades de producción, hoy estamos en 3 turnos porque van a fabricar 200.000 unidades. Quizás antes para fabricar esa cantidad necesitabas 20.000 laburantes, hoy capaz que con 12.000 lo podés hacer, Ahora de esa fábrica que te menciono tenía 5.000 compañeros y hoy duplicamos la dotación. Lo importante es que tenemos que lograr un equilibrio, estando atentos, controlando y manejando todo con la mayor responsabilidad.

-Hablemos de la relación con su secretario general Ricardo Pignanelli. Juguemos a ponerle una etiqueta al vínculo. ¿Ustedes son Juan Román Riquelme y Martín Palermo dentro de la cancha, John Lennon/Paul McCartney en Los Beatles, Charly García/Nito Mestre en Sui Géneris, Hugo Moyano y Pablo? ¿Cuál elegiría?

-Con Ricardo Pignanelli somos dos hermanos y como tales nos cuidamos mutuamente.

«No necesito nombrar a Perón o a Evita porque los tengo que honrar todos los días actuando como ellos nos enseñaron. No pude conocerlos, pero nos dejaron un legado, porque el peronismo no es una idea política, es una forma de entender la vida»

-¿Espalda contra espalda?

-Sí, pero sobre todo tenemos muy en claro qué es  lo más importante es la organización. Por eso acá no hay celos por el poder, ni de conducción ni nada parecido. Vos podés estar hablando conmigo de todos estos temas, salís de esta oficina lo ves a Ricardo y palabras más o menos te va a decir lo mismo que te digo yo. Porque pensamos de la misma manera, entendemos al sindicalismo igual pero sobre todas las cosas respetamos una historia. La que acá comenzó a fines de los 60 con la Lista Verde, con Kloosterman (Dirck Henry) y José Rodríguez, en un gremio donde nos inculcaron una forma de ser, de traccionar, la cual se ha ido transmitiendo de generación en generación. Nosotros de hecho lo comunicamos también a los más cuadros jóvenes porque en algún momento ellos nos van a tener que suceder. Lo que está por encima de todo, lo más importante para nosotros es que la esencia del gremio siga vigente para que los trabajadores se sigan identificando con nuestra organización como lo hacen hoy.

-¿Es decir que si le pregunto por su ego, me diría que usted logra dominarlo?

-(Pausa de reflexión) Mirá, alguna vez siendo muy joven en la política yo usaba el ‘peronómetro’. Dentro de mi rebeldía apuntaba a otros y decía ‘éste no es peronista, porque bla, bla, bla’. Hasta que un día me agarró un compañero, de muchos años, de la ortodoxia peronista. Bueno, él con gentileza me dijo ‘Paco, no pongás el peronómetro arriba de la mesa’. Ahí entendí que no soy más peronista que nadie ni menos peronista que ninguno. Hablo mucho con compañeros, dirigentes y también con la gente. Vas a muchos lugares y ves que ponen las fotos de Perón y Evita, la bandera del Partido. Bueno una vez un compañero durante una reunión de esas me preguntó por qué yo no mencionaba ni al General ni a Eva. En realidad muchas veces apelo a frases de ámbos para remarcar determinadas situaciones, pero mi respuesta a ese compañero fue: ‘Mirá, no necesito nombrar a Perón o a Evita porque los tengo que honrar todos los días actuando como ellos nos enseñaron. No pude conocerlos a ellos, pero nos dejaron un legado porque el peronismo no es una idea política, es una forma de entender la vida’.

-Vaya definición.

-Es como lo que hablo con los compañeros más jóvenes, y les pregunto: ‘Cuándo ves a un chiquito o una chiquita revolviendo los tachos de basura para comer. ¿Qué sentís?’ Y recibo diferentes respuestas. Ahora yo les digo siempre lo mismo: a mí no me da lástima ni tampoco siento compasión. Porque cuando veo eso lo que me da es bronca. Y creo que si te da bronca, bueno entonces sos peronista. Podrás sentir lástima, etc, pero entonces tendrás otra idea. Pero si sos peronista te da bronca y es la bronca que tenemos hoy.

-¿Nos puede ampliar esa idea?

-Hablo de que vemos problemas muy concretos durante un gobierno peronista. Y no digo de encontrar la solución inmediata, porque tenemos que ser consientes de todo lo que heredamos. Te hablo de la destrucción del tejido social que no vamos a poder arreglar en 4 años. Lo que sí tenemos que hacer es planificar, trabajar, llevarle a la gente nuestra idea de cómo pensamos cambiar las cosas para solucionar sus problemas. Porque creo que hoy estamos fallando como fuerza política.

-¿También siente bronca porque se discute a cielo abierto si el kirchnerismo es peronismo?

-La discusión política es valedera. No está mal que cada agrupación exprese lo que siente. Ahora lo ideal sería que esa discusión sea puertas adentro, incluso del propio Partido, como se hacía antiguamente. Nos juntamos ahí, nos decimos todo lo que nos debemos decir, si nos tenemos que cagar a trompadas lo hacemos también. Ahora, cuando salimos del Partido, de esa discusión, lo hacemos todos esclarecidos y con un mismo discurso. Porque fijate que el problema de hoy no es exclusivo del peronismo, lo tiene también la oposición, es un problema de la sociedad. Hoy Patricia Bullrich lo mata a Larreta, Macri se hace el pelotudo, con lo cual también se están amasijando adelante de los medios. Y además fijate que como sociedad perdimos la capacidad para debatir. Hablo de escuchar la opinión distinta del otro, tomarme ese tiempo para entenderlo. Aún yo piense diferente se trata de encontrar la forma de ver si hay algún punto de encuentro.

-Alguien dijo alguna vez que “la realidad es la única verdad”.

-Es que lo ves en los medios, ¿Qué ves?: el quilombo. Entonces tenés a Gran Hermano con un rating tremendo, o los programas armados donde se van a dirimir públicamente cuestiones familiares. Se determinó que lo que vende en la sociedad es el conflicto permanente. Lo cual se desparramó por todos lados y también llegó a la política. Cuando Cristina en La Plata habló de la búsqueda de los consensos, no dijo que teníamos que ir a rendirnos a los pies de nadie. Dijo clarito que este país necesita acuerdos políticos básicos de todas las fuerzas, más allá de las diferencias. Existen 2 o 3 temas que deben tener prioridad de Estado y como tales tener leyes de Estado.

-Lo cual implica un Estado presente.

-Gobierne quien gobierne, para todas las fuerzas políticas. Después nos pelearemos sobre cómo distribuir las riquezas, si pretendemos un país industrial o con libertad de mercados, incluso si el Estado debe estar presente, y la lista sigue. Pero hay cuestiones básicas para acordar si pretendemos de verdad que el país mejore. Lo cual hoy parece imposible, porque tengo que decir también que esa voluntad de diálogo debe ser compartida, y están los que no quieren escuchar. ¿Cómo hacemos para dialogar con ellos, te pregunto?

«Cuando Cristina en La Plata habló de la búsqueda de los consensos, no dijo que teníamos que ir a rendirnos a los pies de nadie. Dijo muy clarito que este país necesita de acuerdos políticos básicos»

-Usted me dice: ¿Cómo dialogar con aquellos que nos desprecian?

-Como lo decís vos. Como Frente de Todos. ¿Qué puedo ir a hablar con Patricia Bullrich, con Javier Milei y otros? Son personas que sienten un profundo desprecio por el peronismo. Y como el peronismo hoy está encarnado en la figura de Cristina, dicen bueno, hay que pegarle a Cristina. Pero no nos engañemos, la realidad es que le pegan al peronismo. Y cuando proscriben a Cristina, tenemos que ser muy claros para ponerle el énfasis necesario, no proscriben a una persona, proscriben a un modelo de país, a la voluntad popular. Entonces lo que nos corresponde, si la compañera Vicepresidenta hoy tiene intenciones de postularse, es traccionar en tal sentido. Porque la proscripción es todo un invento, un relato armado por ellos, los que cuando gobernó Cristina decían que había un relato kirchnerista. Bueno, por ahí van ellos, para fortalecer una estrategia política basada en el poder que pueda tener la Corte Suprema, basado también en la impunidad total. Por eso cuando me preguntaron y preguntan sobre el Juicio Político a la Corte, considero que más que eso hay que hacerles un juicio penal a los jueces de la Corte. Ya que ellos, en realidad, son una asociación ilícita.

-¿Cómo?

-Si nos basamos en que una asociación ilícita hace a la figura de un grupo de 2 o más personas que se reúnen para cometer un ilícito… Bueno, estos muchachos se reunieron para violar la ley. No para cumplirla sino para manipularla, desde una asociación ilícita.

-Y que además no pagan el impuesto a las Ganancias, permítame amenizar un poco.

-No es que no paguen Ganancias, en realidad eso es lo que menos me importa, lo que te digo es que no tienen costo político. Ellos no pagan con la pérdida del prestigio, con la condena social, desde la impunidad total. No sé cuántos miles de hojas tenían los fundamentos de una condena que en realidad son todos supuestos. Sucede entonces que en este país te pueden poner los grilletes, porque vos creés que soy una mala persona. No porque lo pudiste probar, con pruebas contundentes. No, se habla de la ‘semi prueba’, que ‘entendemos’, ‘suponemos’ y de que ‘estamos convencidos’. ¿Quiénes son estos tipos? ¿Quiénes son?

-¿Se agarró a trompadas muchas veces por discusiones gremiales o políticas?

-(Silencio y risas) Qué pregunta difícil que me hacés. Discutí mucho por la política, muchísimas veces y muy fuerte. Mirá, soy una persona que tiene muy claro lo que piensa y lo que representa. Y no me avergüenzo de lo que pienso ni de lo que represento. Cuando inicié mi recorrido sindical iba a muchos lados, obviamente la gente no me conocía. Y cuando vas a una fiesta o a una reunión llega la pregunta sobre: ¿Qué hacés, a qué te dedicás?Entonces, siempre orgulloso de lo que hago, yo respondía que era dirigente sindical. Ahí del otro lado recibía la famosa y corta descalificación: ‘buehhh’ y veía que el tipo movía la cabeza para los costados. (Pausa compartida entre risas) Bueno, entonces les decía: ¿Vos me conocés a mí?  No. ¿Y entonces? Era el momento donde se armaban las discusiones fuertes donde me tenía que ir porque no iban a terminar bien… Jamás me avergoncé ni me averguenzo de eso.

-Aunque no lo declame Smata fue una de las bases para gestar el Frente de Todos. Mirando a las elecciones que vienen, a si Cristina será candidata o no. ¿Qué piensan ustedes?

-En Smata lo que piensa Manrique, lo piensa su secretario general Ricardo Pignanelli: Cristina nos brinda una seguridad que no sólo pasa por lo electoral. Obviamente que me gustaría que ella fuera candidata y te repito, no porque nos garantiza un piso electoral lo suficientemente robusto para construir una victoria contundente. Me gustaría Cristina candidata porque no me tiene que explicar nada, porque ya me demostró, nos demostró, qué clase de país quiere, sé del coraje que tiene para enfrentar ciertas batallas que es necesario dar en la Argentina, sé lo que piensa respecto a la deuda externa y cómo lo va a traccionar. Los demás compañeros y compañeras que tienen aspiraciones presidenciales, bueno, son buenos compañeros/as incluso con muchos de ellos tengo buena relación, pero a ellos los tengo que estar adivinando. Y esto que te digo, también le pasa a la gente, porque ya saben cómo es Cristina, cómo piensa, cómo va a gobernar y la gente sabe también las luchas que hay que dar. Si no es Cristina y más allá del candidato que nosotros consideramos que tiene que surgir por consenso, también tiene que tener un plan de Gobierno para poder transmitirlo a la población. Como espacio político creo que uno de los grandes errores que tuvimos fue tratar de congraciarnos con una clase social que no nos va a votar nunca. Entonces a nuestros votantes, que son los humildes, los trabajadores, los pequeños y medianos empresarios, bueno, a ellos nunca les explicamos qué vamos a hacer o al menos qué tenemos en mente para sacarlos de esta situación. Cómo vamos a generar empleo para todos aquellos que hoy sufren el flagelo de no tener trabajo. Cómo vamos a insertar a todos los que hoy dependen de un plan social. De cuáles son nuestras ideas porque sabemos que esto es a largo plazo, pero que al menos hay una posibilidad de trazar un camino. Y cómo vamos a obtener los recursos que se necesitan para desarrollar las soluciones. Decirles, «miren nos vamos a tener que pelear con éste  y éstos otros». Porque por ejemplo la inflación, en parte es por un problema que hoy existe en casi todo el mundo. Como lo fue la crisis del 2009 en los Estados Unidos y después la pandemia, donde el mundo económico sufrió transformaciones y todavía debe seguir acomodando sus huesos. El fenómeno inflacionario asoma hoy también en Estados Unidos y en muchas naciones europeas.

«En Smata con la llegada de Néstor se generó un arranque en 2004/2005 y para 2015 terminamos con 94.000 laburantes. Es decir que luego de los gobiernos de Néstor y Cristina sumamos 69.000 trabajadores. Por eso a veces se discuten cosas y la memoria le falla a un montón de gente»

-Digamos que la crisis de la Argentina tiene ingredientes absolutamente propios.

-Claro, a lo que te describo se suma acá la irresponsabilidad de sectores del empresariado nacional. Que multiplican incluso a la inflación. Y ahí como Estado estamos fallado, porque si hago un acuerdo por los precios con los formadores, las cadenas de distribución de fabricación y demás en una lista donde pongo 1.500 productos pero después cuando vas a las góndolas, con suerte encontrás 3. Porque el resto los vas a encontrar al precio que ellos quieren y no pasa nada. Y fijate que en esos países del mundo desarrollado, que ellos nos muestran como ejemplo y bla, bla, bla, una empresa exitosa tiene una una rentabilidad que va del 7% al 10%. Empresas exitosas ¿eh? Acá la rentabilidad de las empresas es del 100%, y yo no les pido que pierdan plata. Les pido: muchachos pongan el hombro, bajá tu rentabilidad al 15%, porque no te vas a fundir y ayudás al país, al Gobierno y por ende a la ciudadanía para que estemos mejor. Porque después esa mejoría, como empresario, te va a redituar, porque se fortalece el mercado interno, el consumo. Acá es donde nosotros fallamos. Porque la oposición te habla de la no interferencia del Estado, que significa un Estado ausente. Ahora si llego a un acuerdo con vos empresario para que este encendedor salga a la venta por 10 pesos y a la semana lo ponés a 15 pesos, bueno, yo no te puedo multar porque lo que vos vas a hacer es aumentar el encendedor y ya recuperás la multa. Ahora si voy y te clausuro, si tomo medidas más profundas, obviamente te vas a cuidar. Por eso cuando se hizo el acuerdo con Camioneros y otros gremios para salir a controlar los precios, fijate que todo el mundo empresario se ofendió. Ahora no se ofendieron porque eran Camioneros u otros compañeros sindicalistas que los iban a controlar, lo que los ofendió fue el control. Y seamos claros, si vos no tenés control respecto a las medidas que tomás, es como si no las hubieras tomado. Y queda claro que nosotros estamos pagando costos políticos por eso. Porque vos a la sociedad le estás diciendo que esto vale tanto, un precio que la gente no va a encontrar ni en el almacén, el supermercadito o en las grandes cadenas. Entonces ponemos una aplicación para verificar los precios, que yo la tengo, pero no funciona.

-Además de todo lo que me explica, qué potencia cree que tiene una variable no económica. Hablo del desprecio por los pobres, los trabajadores, los que perciben planes sociales.

-Es que acá pasamos de tener una grieta política a tener una lucha de clases. Es así, lamentablemente. Los grandes poderes no quieren una reforma laboral porque eso les brindará la posibilidad de invertir. Lo que quieren es ver a los laburantes arrodillados, por el solo hecho de tener esa satisfacción y ahí es cuando se plantea una lucha de clases. Y es algo que en este país no pasó nunca, siempre hubo una pelea entre un gobierno popular y otro liberal, peronistas contra los viejos liberales o conservadores. Porque fijate que antes el conservador por lo menos era nacionalista, digamos te quería comer los tobillos pero tenía el sentido nacional. Hoy no, porque cuando ellos atacan al peronismo lo que me gustaría es que hagan un repaso desde 1945 en adelante. Porque hay muchos grandes y viejos actores del mundo empresarial repasando la cantidad de gobiernos peronistas que hubo. Obviamente saquemos la dictadura militar al costado, y que ellos hicieron sus grandes negocios con los milicos, bueno todos esos viejos y grandes actores del mundo empresarial crecieron y se hicieron millonarios durante gobiernos peronistas. A mí cuando un gorila me denosta al peronismo, le digo: ¿Cómo llegaste vos a ser lo que sos?

-¿Usted tiene amigos gorilas?

-¿Qué? Nunca podría ser amigo de un gorila, conocidos tengo muchos. No tengo problema en sentarme en una mesa a debatir con un gorila, razonablemente. Porque como peronista entiendo que más allá de todas las virtudes que tiene el peronismo, para reivindicar a los laburantes y trabajar para encontrar el equilibrio social necesario, también hemos cometido algunos errores en la historia. Menem fue un error en la historia del peronismo, ¿y qué dicen los gorilas de Menem? Dicen que es bueno, y Menem era peronista, bueno, no jodamos. Acá lo que intentan es eliminar una idea que es el último escollo para ir a fondo y satisfacer la voracidad de sus intereses en la manera más exponencial. Y saben que mientras el peronismo exista, no lo van a poder hacer. Por eso ahí hay algo que nosotros también tenemos que revisar hoy. Por ejemplo que tenemos muy pocos medios de comunicación que comparten nuestro pensamiento. La mayoría de los medios responden hoy a los intereses del capitalismo salvaje. Pero es más delicado todavía, fijate que en nuestros medios también nos la pasamos hablando de lo que ellos dicen, en vez de hablar de lo que nosotros pensamos o queremos hacer. Sin querer los seguimos alimentando, entonces Macri en el culo del mundo dice una boludez y estamos todo el día en nuestros canales y radios hablando de eso. ¿Y qué me importa a mí lo que haya dicho Macri? Si ya sé quién es, cómo piensa, las barbaridades que dice y dirá. Ahora por ejemplo analizan el video de Ricardo Bussi, el hijo del ex gobernador y represor de Tucumán, sobre el uso de armas, de un tipo haciéndose el cowboy en una filmación. ¿Por qué tengo que analizar esa burrada?  Porque es una burrada.

-¿Y qué debería analizarse en su parecer?

-Que al compañero o compañera nuestro abre la heladera y la tiene vacía. ¿Vos pensás que a esa persona le importa a cuánto está el dólar, Twitter, la electromovilidad, etc? Acá hay que atender lo urgente en primer lugar. Sin atender lo urgente no vamos a llegar a tratar lo importante.

-En base a todo lo que ha dicho, hábleme de Pablo Moyano y de la CGT.

-Si hay una virtud que tiene Pablo es que es un tipo noble y transparente. Él dice lo que piensa para no estar disimulando nada, así se gana la simpatía o la antipatía de las personas. Como todos los que traccionamos en esto de esa forma, generamos amores y odios, mientras sean más los que nos amen, es que estamos haciendo las cosas bien. Y después sobre la CGT… (algunos segundos de silencio). Mirá cuando hicimos la unidad estuvimos hablando muchísimo, hubo muchísimas reuniones con los compañeros. Y nunca pudimos lograr la unidad de concepción para transitar el camino que el Movimiento Obrero demanda. Porque en la problemática de hoy el Movimiento Obrero debería ser un actor fundamental. En algún momento la política nos dividió y no pudimos salir de esa maraña. Si tenés que hacer un repaso de los compañeros que están en la CGT, bueno Pablo Moyano es el más representativo que tenemos. Cuando hay una movilización él camina entre la gente, se para hablar con todo el mundo y eso tiene un valor. Yo veo que otros dirigentes cuando la gente está en la Avenida Callao ellos están en la 9 de Julio. Mirá, la CGT se maneja por WhatsApp, y con eso te puedo decir todo. No lo digo en sentido figurado. Se armó un grupo de WhatsApp del cual obviamente salí al otro día que lo armaron. En ese momento me calenté muchísimo y los compañeros del Frente Sindical se borraron todos de ese grupo que se había armado. Desde la misma mirada tengo que reconocer que muchas medidas que toma el Gobierno se transmiten por Twitter. ¡El ex ministro de Economía Martín Guzmán renunció por Twitter! Y se designó un nuevo ministro por Twitter. Entonces cuando hablamos estos temas con mis compañeros les pido que levanten la mano aquellos que tienen Twitter. Por ahí de 500 trabajadores y trabajadoras te levantan la mano 20. ¿Y resulta que esos 20 son los informados y el resto, incluido yo somos todos unos pelotudos? Porque se supone que si no tengo Twitter no me entero de nada. Bueno, creo que tenemos que retomar, y espero que lo hagamos ahora ¿Eh? Para ir a hablar con los militantes hablándoles a los ojos, porque fijate que en Twitter no te repregunta nadie. Y cuando vos no tenés repreguntas no podés esclarecer, algo que necesita el Pueblo Argentino. Más allá de todas las dificultades que existen y que me digan. ¿Cómo le explico a esa persona que te dije que tiene la heladera vacía, a los laburantes que están debajo de la línea de la pobreza, porque hay que hacerse cargo que tenemos a trabajadores pobres. Bueno, ¿Cómo les explico yo que tienen que tener confianza, que nos tienen que entender, que nos tienen que volver a votar, que si no somos nosotros lo que viene será peor para ellos? La única manera es hacer una reunión, mirándolos a la cara, contestando sus preguntas, reconociendo nuestros errores y asumiendo el compromiso de asumir la responsabilidad para cambiar la historia. Y esto que te enumero, a través de las redes sociales no lo puedo hacer. Porque también les pasa a ustedes, los periodistas de cualquier palo, del medio que fuere, hablan y comentan lo que se dice o se dijo en Twitter. ‘Mirá lo que dijo Fulano’, ‘Lo retuiteó Sultano’ y dale que va. Bueno, mirá la tecnología es saludable, los chicos hoy son más ágiles mentalmente, porque esa misma tecnología los obligó a razonar más rápido pero ojo, porque la tecnología también nos disoció y nos hizo perder cosas que tenemos que recuperar, que son imprescindibles para vivir.

«Pablo Moyano es el más representativo que tenemos. Cuando hay una movilización él camina entre la gente, se para hablar con todo el mundo y eso tiene un valor. Otros dirigentes cuando la gente está en la Avenida Callao ellos están en la 9 de Julio»

-¿Me quiere contar cómo es su familia?

-Están mis 4 hijas, tengo 2 nietos. Tengo a mi madre, 4 hermanos. Una familia muy unida.

-¿Está en pareja?

-Hoy no, pero no me digas que ahora esto es una entrevista farandulera. (risas)

-En estas charlas solemos preguntar por la familia, los que están siempre. Y también por los ‘Amigos del Campeón’, ésos que se acercan por la relevancia que gente como usted tiene.

-Si. claro, pero los el paso de los años y la llegada de la experiencia hace que hoy esas cosas no me pasan, que sí podían suceder quizás 20 años atrás. Hay un momento en que te das cuenta quién se arrima con honestidad, porque quizás está necesitando que le des una mano y quién se te arrima para ver qué te puede sacar. Algunos afirman que ‘los sindicalistas no laburan’. Y yo les digo: para criticarme caminá con mis zapatos. Porque realizar esta tarea te demanda muchísimo tiempo. Para cumplir esta labor, por ejemplo, yo no ví crecer a mis hijas. Y con el tiempo te empiezan a pasar las facturas, que no estuviste en la fiesta del colegio, en otras celebraciones, etc. Mirá para el cumpleaños de 15 años de mi primer hija, llegué media hora antes, y acomodándome el nudo de la corbata. Ella esperándome y yo venía de una reunión donde se estaba discutiendo el cierre de una fábrica. En aquel momento ella no lo pudo entender, con el paso del tiempo sí y aceptan que las cosas son así. Ahora llega el cumpleaños de 3 años de mi nieto y no voy a poder estar, porque estaré discutiendo sobre el futuro laboral de mucha gente y alguna vez le voy a tener que explicar a él esta cuestión.

-Es que para los que tocamos la banquina del ‘Padre Ausente’ sólo queda esperar que los hijos o hijas nos entiendan y nos perdonen.

-Con el tiempo lo entienden y nos perdonarán, a mi nieto mi hija le tendrá que explicar por qué su abuelito no está en su fiesta de cumpleaños. En este sentido no tengo más que agradecimiento para mis hijas como también para mi ex esposa, porque la verdad es que se han bancado todo.