El gremio médico advirtió que por la entrada en vigencia de la ley provincial que prohíbe el cobro de plus a pacientes de obras sociales y prepagas, la mayoría de los profesionales de la salud atenderá a esos afiliados de manera "particular". Según la delegación local de la Asociación Médica de la República Argentina (Amra), la norma sancionada por la Legislatura terminará siendo "contraproducente" para los pacientes, quienes deberán pagar honorarios más onerosos que en la actualidad. Para los galenos, el problema de fondo son los "magros honorarios que pagan obras sociales y prepagas, y las demoras en cobrar esa cápitas".

La polémica se desató en torno a la inminente entrada en vigencia, con sanciones incluidas, de la ley provincial 13.731 que prohíbe en Santa Fe el cobro de plus médico a pacientes de obras sociales y del sistema prepago.

La norma, impulsada por el diputado Luis Rubeo (PJ), fue sancionada a fines del año pasado por la Legislatura y luego promulgada por el Ejecutivo, que no la vetó.

Rubeo anunció días atrás que en abril estará reglamentada la normativa con sus especificaciones respecto a cómo hacer la denuncia ante estas prácticas, cómo serán las inspecciones de la Defensoría del Pueblo y las sanciones, que arrancarán con un salario mínimo vital y móvil, hoy en $9.500.

Ante este escenario, Amra advirtió sobre el impacto negativo que tendrá para los pacientes y la salud en general la implementación de la polémica normativa.

"La ley terminará siendo contraproducente para los pacientes, no los beneficiará sino que los perjudicará, porque esta norma no soluciona los problema de base del sistema de salud", avisó la secretaria gremial de Amra, Sandra Maiorana.

"Esta ley no contempla lo que está pasando en el sector, donde lo que la obra social paga de consulta muchas veces llega tres, seis meses después al médico y en una cifra menor, porque las clínicas y sanatorios primero se quedan con los gastos sanatoriales y le pagan al médico cuando quieren y pueden", dijo Maiorana.

La referente gremial fue más allá y precisó que "en el caso de las cirugías, el médico paga por el quirófano lo mismo que la obra social le paga por la práctica, y termina trabajando gratis o cobrando cifras irrisorias que además nunca sabe cuándo las va a cobrar".

Para Maiorana, el texto debió haber contemplado sanciones "a las clínicas que hacen esto y trasladan el pago a los médicos a meses posteriores y les pagan menos, ya que antes retienen parte del importe por los gastos sanatoriales".

Maiorana resaltó que "hay muchos médicos que sólo terminan cobrando el plus, no porque estén de acuerdo sino por que fue la forma que encontraron para poder seguir trabajando y atendiendo a los pacientes".

A criterio de Amra, por la entrada en vigencia de la denominada ley Rubeo, "aquellos profesionales que consideren insuficientes los magros honorarios abandonarán el listado de prestadores de las obras sociales y atenderán sus pacientes como "privados". Esto ocurrió en Reconquista con los tocoginecólogos".

También ocurrirá que "aquellos profesionales que perciban fuera de término sus prestaciones, recurrirán al corte de crédito prestacional, aconsejado y avalado por Amra, atendiendo en forma "particular" y extendiendo el recibo correspondiente para que el paciente pueda solicitar el reintegro".

Por eso el gremio instó a las obras sociales y gerenciadoras, "a que actualicen los honorarios y los abonen al mes vencido, y en especial a los sanatorios, que abonen en tiempo y forma".

"Esta ley es política, fue pensada para que el diputado Rubeo se luzca tratando a los médicos como delincuentes. Y lo peor es que tuvo información para modificarla y no nos escuchó. Es más fácil presentar esto, salir en la televisión para que me voten. Pero están cortando el hilo por lo más fino, sin atacar el problema del financiamiento, los plazos", dijo Maiorana.

Lamentó que "los senadores aprobaron la ley a libro cerrado sin escuchar los argumentos y las propuestas de reforma de los médicos a la media sanción".