"Estuvimos reunidos con el compañero Otero a los efectos de poder avanzar en la normalización. La verdad es que fue una jornada muy positiva que nos permitió juntarnos nuevamente a todos los dirigentes y de esta manera pasamos a un cuarto intermedio para los primeros días de mayo con la finalidad de poder normalizar a nuestra querida Confederación General del Trabajo Filial La Rioja", observó Peña.

En cuanto a lo acordado, Peña mencionó que se acordaron los modos de proceder, “vamos a hacer un triunvirato, las condiciones de las elecciones, pero prevaleció, como planteamos todos, la unidad”.

Por lo que recalcó, que la prioridad de todos los dirigentes es la unidad del movimiento obrero.

Asimismo, el dirigente gremial comentó que durante el encuentro se abordaron otros aspectos que hacen a “la vida misma de los trabajadores y al conjunto de los argentinos”.

Al ser consultado sobre la factibilidad de la unidad, advirtió que las probabilidades son altas “creo que faltan pequeñeces nada más, no hay una cuestión de fondo que nos divida, todo lo contrario creo que hemos buscado el consenso y todos los puntos que nos acerquen en las posiciones”.

En la misma línea, dejó en claro que en esta oportunidad no se podía normalizar porque no había convocatoria para normalizar, sino que se trataba de una instancia para el reencuentro.

No obstante, sostuvo que la conducción de la CGT tiene el mandato vencido, “la realidad es que no teníamos una conducción que tenga que renunciar, es decir, quedar acéfala a los efectos de que podamos estar normalizada. Las condiciones están dadas porque están todos los mandatos vencidos. Lo que teníamos que hacer es ponernos de acuerdo para elegir a compañeros y que la sociedad entienda que también se producen algunos cambios”.

Para culminar, remarcó que la próxima reunión con las autoridades de Buenos Aires, se estaría concretando la primera semana de mayo.