El secretario general del Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación -STIA- de Córdoba, advirtió un panorama complejo en el marco de las negociaciones salariales que se avecinan.

"No será nada fácil negociar, sobre todo porque no tenemos libertad para hacerlo. Desde el gobierno se anuncia todos los días que la inflación no superará el 15 por ciento y que el aumento de salarios no podrá superar esa cifra. Ya en ese sentido hay un engaño porque este gobierno ha fracasado completamente en el control de la inflación", adelantó Morcillo en una entrevista realizada por Amalia Antunez para el sitio web de la Regional Latinoamericana de la Unión Internacional de Trabajadores de la Alimentación.

Además de recordar que la inflación anual superaría el 20% durante 2018 -según datos de diversas consultoras privadas-, el también secretario adjunto de la Federación de Trabajadores de la Industria de la Alimentación de Argentina -FTIA- aseguró que la aplicación de cláusulas gatillo tampoco será suficiente ya que tal mecanismo "no contempla los aspectos de calidad de vida que se pierden".

"Si yo antes destinaba un 10 por ciento de mi salario a pagar servicios públicos y transporte y ahora destino un 35, evidentemente los otros rubros se verán resentidos en el consumo", adelantó el dirigente, pensando en las negociaciones que el sector encarará en el mes de abril próximo.

Y agregó: "Nos basamos en dos premisas fundamentales: el 15 por ciento no es suficiente y la cláusula gatillo tampoco alcanza. Por otro lado no queremos perder poder adquisitivo de los salarios. Vamos a defender nuestro convenio, no vamos a permitir que se cercenen derechos y beneficios adquiridos para beneficiar únicamente a los empresarios".

Reforma laboral

Al ser consultado por el paquete de reformas que el gobierno de Mauricio Macri impulsa como parte de una serie de políticas de ajuste, Morcillo reiteró su repudio a las mismas.

"Nuestra federación siempre mantuvo una postura muy clara con relación a la reforma laboral, muy parecida a la realizada en Brasil, favorable a los empresarios y contraria a los intereses de los trabajadores y trabajadoras", sentenció.

Y prosiguió: "El discurso imperante de los empresarios es que Argentina no es competitiva a nivel internacional y que ello se debe al alto costo laboral que tienen. No hay, sin embargo, ningún estudio que indique cuál es la incidencia real del costo de mano de obra en el valor final de los productos".

Por último, al referirse sobre la situación del movimiento obrero frente a los embates del gobierno nacional, Morcillo valoró la importancia de la unidad.

"No hemos sido capaces de tener una política de acción unificada. Para poder enfrentar lo que se nos viene tenemos que presentar una unidad monolítica de la que hoy lamentablemente carecemos. Pero confío plenamente en el conjunto de los trabajadores y trabajadoras más allá de los dirigentes, porque el movimiento obrero en su conjunto ha sabido defender sus conquistas y esta vez no será diferente", manifestó.

"Desde la federación continuaremos bregando por la unidad sindical, por solucionar disputas personales entre dirigentes y que desde la central obrera se pueda gestionar un proyecto de trabajo en común que marque las estrategias a seguir con el gobierno que sea. Para eso hay que tener una postura bien clara de defensa de los derechos y de conquista de nuevas mejoras en la calidad de vida de todos los argentinos", concluyó el titular del STIA Córdoba.