Ya está casi todo listo para que la reforma laboral sea debatida en el Senado. El proyecto impulsado por el Gobierno y consensuado con la cúpula de la CGT fue enviado la semana pasada al Congreso y se espera que comience a ser debatido esta semana.

Sin embargo, un grupo de disidentes de la central obrera anunciaron la conformación de una corriente sindical para organizar marchas y protestas los días en el que la iniciativa sea tratada.

A la cabeza de la oposición a la reforma laboral son Sergio Palazzo (bancarios) y Pablo Moyano (camioneros). Ambos referentes de la CGT lanzaron este lunes el "Encuentro Militante por la Soberanía Nacional y Popular", que convoca a una "movilización al Congreso".

A ellos también se sumaron Claudio Girardi (secretario general de la CGT Santa Fe), Horacio Ghilini (Sadop), Héctor Amichetti (gráficos), Víctor Correa (curtidores), Vanesa Siley (judiciales) y Hugo Yasky (CTA).

A través de un documento, los sindicalistas afirmaron que las tres reformas impulsadas por Macri -tributaria, laboral y previsional - "se complementan", y "no cabe duda que las tres iniciativas están vinculadas".

Reunidos en el camping del Sindicato de Farmacia, ubicado en la localidad bonaerense de Luján, los sindicalistas pactaron cuatro puntos de lo que intenta ser un plan de lucha que aún no tiene fecha de arranque.

En el primer punto, convocan "a todos los trabajadores a movilizarse ante el Congreso de la Nación para exigir el rechazo de estas reformas". En el segundo, ratifican "la necesidad de articulación con otras corrientes sindicales, organizaciones sociales, movimiento cooperativo y Pymes, para desarrollar un plan de lucha".

En el tercero, reclaman "la inmediata reanudación de la sesión del Comité Central Confederal de la CGT, junto a la urgente convocatoria de un Plenario de Delegaciones Regionales"; y en el cuarto, solicitan "a todos los bloques de legisladores nacionales que escuchen nuestros reclamos y resuelvan el rechazo de estas reformas".