El Sindicato de Trabajadores Municipales (STM) resolvió hoy aceptar la propuesta de incremento salarial ofrecida por el Ejecutivo por lo que se destrabó el conflicto que incluyó dos jornadas de paro en la última semana.

La aceptación a la propuesta se resolvió el lunes a la tarde por mayoría en una asamblea desarrollada en la sede gremial, luego de una jornada de retención de tareas.

El ofrecimiento consistió en un aumento del 30% dividido en tres tramos. Un 10% retroactivo a agosto, un 10% en septiembre y otro 10% en octubre.

En lo que va de 2022, el Sindicato de Trabajadores Municipales y la gestión de Montenegro ya habían acordado un aumento salarial del 36%. De esta manera, los empleados municipales llegarán a un incremento del 66% en lo que va del año, hasta el mes de octubre.

Además, el Ejecutivo y el Sindicato acordaron volver a reunirse en noviembre para evaluar la situación salarial en función del avance inflacionario.

Los trabajadores municipales llevaron adelante ayer la segunda medida de fuerza en una semana, con una retención de tareas y permanencia en los lugares de trabajo. La medida de fuerza incluyó todas las áreas de la comuna, incluido el sistema educativo municipal por lo que no hubo clases en ninguno de los niveles.

Cerca del mediodía, el intendente Guillermo Montenegro mantuvo una reunión con el Sindicato de Trabajadores Municipales (STM). Fue la primera vez que el jefe comunal se reunió con la cúpula sindical y si bien el encuentro se desarrolló en buenos términos, no hubo una propuesta salarial concreta.

El ofrecimiento se materializó a la tarde, poco antes de la reanudación de la asamblea prevista para las 18 en la sede gremial.

Idas y vueltas

La negociación salarial se extendió por varias semanas. Los municipales reclamaban una suba del 20% para agosto y un 10% en septiembre, para contrarrestar el impacto de la inflación mientras que el primer ofrecimiento del Ejecutivo consistió en un aumento del 10% en agosto, un 5% en septiembre y un 20% en noviembre.

El último jueves, el sindicato realizó un paro (el primero en la gestión de Montenegro) y cientos de trabajadores marcharon con banderas y bombos hasta la Municipalidad. Luego, en la asamblea del viernes se resolvió llevar adelante el lunes una retención de tareas con permanencia en los lugares de trabajo.

Finamente, con la decisión mayoritaria de aceptar la oferta, el martes volverá la actividad con total normalidad en el ámbito municipal.

“Es un avance”

El secretario general del Sindicato de Trabajadores Municipales, Antonio Gilardi, aseguró luego de la asamblea que el acuerdo “no colma en forma total las expectativas pero es un avance importante”.

En la asamblea extraordinaria hubo diferentes posturas y algunas discusiones hasta que finalmente se votó por mayoría aceptar la propuesta ya que, de prolongarse el conflicto, estaba el riesgo de no cobrar el aumento en septiembre.