El nuevo gremio artístico SATRA adaptó la actividad a las nuevas modalidades y ofrece alternativas del nuevo trabajo a la orden de los afiliados.
La aparición de una nueva organización sindical siempre significa una oportunidad para una masa de trabajadores que busca una identificación. Más allá de las cuestiones políticas y burocráticas de un hecho de estas características, en este caso el surgimiento del SATRA tiene algunas particularidades que lo hacen distinguido.
El SATRA- Sindicato de Artistas Trabajadores de la República Argentina– ya completó los formularios y presentó en la Mesa de Entradas del Ministerio de Trabajo Nacional, donde tanto Kelly Olmos –ministra de Trabajo- como Mónica Risotto –Sindicales- se hicieron eco de un grupo de dirigentes del ambiente artístico que encausaron una organización que trabaja al ritmo de un gremio íntegramente constituido.
Los artistas ahora tienen un nuevo sindicato
“Queremos que el artista entienda que se debe manejar como un trabajador. Que entienda que tiene derechos, que puede exigir aun siendo callejero, del Under o si es Flavio Mendoza. Todos deben ser tratados igual. Estandarizarlo”, refleja Jorge Scorpaniti, secretario Adjunto.
“Trataremos de ser la voz del artista, de armar una estructura de capacitación. Hoy es muy caro alquilar una sala de ensayo o armar un espectáculo si no sos alguien contratado. Abarcamos una gama muy grande, desde DJ´s, bailarines, del circo, gente que está atrás como maquilladores, iluminadores o peinadores. No están tratados como artistas, pero lo son, todos tenemos la misma importancia,” augura.
“Pensamos en una formación totalmente distintita, vimos que en otro lado tenían otras preocupaciones en mente, que no les interesaba el artista. Cuando vimos que nos estábamos dando la cabeza contra la pared, decidimos crear Satra”, cuenta Felix Rodríguez, secretario gremial.
Cuando el dirigente se refiere a crear una agremiación “diferente”, desarrolla que “hay que entender la forma de trabajo del artista, que no lo hace 365 días al año y los que más suerte tienen trabajan una temporada” y “el resto tiene dos o tres trabajos porque como artistas no sobreviven”.
La importancia no de ir, sino de quedarse
Lo que más llamó la atención de la fundación del SATRA es la modalidad escogida y las prestaciones que se brindan en relación a la cuota sindical, la cual no es requerida al momento de afiliarse.
Las principales autoridades que impulsaron el sindicato de Artistas definieron que durante el primer tiempo de vida del gremiono se cobre al trabajador/a por afiliarse y que a cambio, pueda aprovechar las herramientas brindadas por la organización para exprimir su profesión. “Una vez que ese trabajador se sienta respaldado/a por el sindicato, recién ahí se podrá hablar de aportes. Hoy nuestra preocupación pasa porque el artista esté impecable para subirse a un escenario para difundir la cultura de este país. Algunos hacen monólogos, otros humor, baile, acrobacia, etc.”, explica Rodríguez.
Artistas callejeros
El SATRA ofrece a quienes se acerquen al gremio beneficios tales como salas de Stream, de radio, espacios de ensayos, de grabación, castings, convenios turísticos, de transporte, hoteles y cursos de formación.
Obra Social
En la Capital Federal, centro neurálgico de una Patria que busca federalismo pero que pierde por goleada en el intento, se pueden encontrar shows de todo tipo. Salas de teatro, recitales y propuestas desde el más alto nivel internacional, pasando por los enormes artistas de jerarquía de la televisión argentina, hasta el espectáculo callejero o cine/teatro Under que muestra en su realización lo amateur y pasional de los comienzos de una profesión que brindará muchas alegrías pero que demandará un abismal esfuerzo.
Pero a la vez, de recorrida por la Quebrada de Humahuaca, al Norte Argentino, pasando Lago Puelo, en el Sur patagónico, como en el San Javier cordobés o quizás, en alguna calle de la pequeña Saladas, provincia de Corrientes, se puede encontrar un bar, una pulpería, una hosteria o una plataforma que oficie de escenario para que un enamorado del arte brinde a su audiencia una melodía que endulce su trayecto o una humorada que sonría las noches argentinas. Allí, en esos suelos lejanos el artista tendrá una cobertura de salud que le permita abastecer un derecho básico.
Kelly Olmos, ministra de Trabajo de la Nación
El SATRA posee un acuerdo con la firma Word Salud.Convenio con clínicas y además para aquellas personas que requieran por su labor la realización de arreglos estéticos o cirugías, estará contemplado en la cobertura.
“Nuestro sueño es un sindicato que tenga todo lo que tiene que tener. Presencia en las 23 provincias, con un respaldo federal. En el interior es donde más ayuda necesitan, están dejados, en esos lugares donde levantas una piedra hay un payador, un cantante, un bailarín o un folklorista. Y en base a las nuevas herramientas que tenemos, tienen todo a disposición”, afirma Rodríguez.
“Hay formas que están obsoletas”
Jeronimo Santos, tesorero del SATRA sostiene que la formación del gremio llega para cambiar paradigmas instalados en el movimiento sindical. Con 27 años, asegura tener las herramientas para “cambiar el mundo sindical”. “Hay formas que están obsoletas”, critica el también Disc Jockey –DJ-.
Durante el próximo periodo de tiempo, y en el comienzo de un año siempre particular en la Argentina, el Ministerio de Trabajo será un actor esencial en este camino del SATRA para otorgarle al SATRA el recorrido jurídico que lo habilite para la actuación gremial.
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